Medicamentos con precios que amenazan la salud

OCU, contra los precios abusivos de los nuevos medicamentos
Muchos nuevos medicamentos para tratar enfermedades graves o raras alcanzan precios astronómicos. Pueden llegar a convertirse en artículos de lujo solo al alcance de unos pocos. Algunos ejemplos de estos precios desorbitados de nuevos medicamentos para enfermedades graves y raras:
- Spinraza (para la atrofia muscular espinal), cuyo precio de venta del laboratorio o PVL asciende a: 420.000 €, el primer año de tratamiento y 210.000 € cada año sucesivo.
- Zolgensma (para la atrofia muscular espinal), pendiente de comercialización en España. Precio en EE.UU.: 2,1 millones de dólares por paciente.
- Kymriah (para la leucemia linfoblástica aguda y el linfoma difuso de células grandes B). PVL: 320.000 € por paciente.
- Yescarta (para el linfoma difuso de células grandes B y el linfoma primario mediastínico de células grandes B). PVL: 327.000 € por paciente.
Tienes más información sobre esos ejemplos de medicamentos a precio de oro en el artículo Acceso a nuevos medicamentos, publicado en OS nº 150.
No queremos medicamentos a precio de oro, artículos de lujo solo para unos pocos: reivindicamos #medicamentosparatodos. Ayúdanos a conseguirlo:
Di NO a los precios abusivos de medicamentos
Una amenaza para los sistemas sanitarios...
Si no hacemos nada para evitar esa tendencia, corremos el riesgo de que llegue un momento en el que los sistemas públicos de salud no puedan seguir financiándolos, o bien que tengan que recortar otros servicios y tratamientos para poder seguir sufragándolos. Ya en el pasado vimos cómo en algún caso se tuvo que racionar ciertos tratamientos y ofrecerlos poco a poco, tal y como sucedió con Sovaldi, el primer antiviral específico contra la hepatitis C.
... y para la salud
Cualquiera de estas opciones, además, implica numerosos perjuicios para la salud de los pacientes y puede poner en peligro su vida. En este vídeo de siete minutos, el Dr. Lamata, exconsejero de Sanidad de Castilla-La Mancha, nos habla de este problema que nos afecta a todos:
Secretismo y especulación en la fijación de precios
Las compañías farmacéuticas determinan el precio de los nuevos medicamentos en función de la disposición a pagar de los Estados y, supuestamente, una vez calculado su coste de investigación y producción. Pero el problema radica, por un lado, en el secretismo y falta de transparencia que rodea la fijación del precio de los nuevos medicamentos y, por otro, en la protección que les otorga la legislación sobre patentes.
La inversión en I+D, ¿justifica esos precios?
Las compañías justifican los elevados precios de sus medicamentos en base a la enorme inversión que deben realizar en investigación y desarrollo (I+D). No obstante, esos costes son en realidad desconocidos ya que esa información no se transparenta ni se hace pública. A la hora de establecer un precio de financiación justo para esos nuevos medicamentos los gobiernos negocian a ciegas, ya que carecen de la información necesaria para saber si el precio exigido es justo o abusivo.
Además no podemos olvidar que las compañías farmacéuticas consiguen desarrollar ciertos fármacos gracias a las inversiones públicas realizadas en I+D, o sea, que ellos no cubren todos los gastos. El ejemplo más reciente lo tenemos con las vacunas contra la COVID-19.
Pactos de silencio entre la industria y los gobiernos
Las compañías farmacéuticas exigen que, una vez acordado el precio final de financiación, este permanezca en secreto y otro tanto pasa con los descuentos acordados. Tras las negociaciones entre el gobierno y la compañía farmacéutica se hace público un precio, al que se denomina “precio notificado” (que no incluye los descuentos pactados).
Pero el verdadero precio final de financiación, el que sale de los impuestos que pagamos entre todos, es confidencial. Esto hace que los diferentes países de la UE e incluso diferentes regiones dentro de un mismo país acaben pagando precios diferentes por un mismo medicamento, ya que nadie sabe cuánto paga realmente el vecino.
El escollo de las patentes
Los medicamentos nuevos gozan de la protección de la legislación sobre patentes que permite, al laboratorio titular de la patente, explotar comercialmente y de modo exclusivo el nuevo medicamento durante 20 años desde su registro hasta el fin de la patente. Este sistema pretende, de este modo, recompensar y fomentar la innovación, impidiendo que otros laboratorios puedan entrar a competir en el mercado con ese mismo producto, paralizando, por tanto, una mayor oferta y con ello una bajada de precios.
No obstante, este sistema de patentes, que elimina la competencia, junto al secretismo en torno a los costes de investigación y desarrollo de los medicamentos, impide la negociación y fijación de precios justos y sostenibles para los sistemas públicos de salud de los nuevos medicamentos.
¿Podría solucionarse con las “licencias obligatorias”?
Actualmente la legislación sobre patentes contempla la posibilidad de que el Gobierno pueda imponer el uso de licencias obligatorias por motivos de interés público. Este mecanismo permitiría que un medicamento, sujeto a patente, de primordial importancia para la salud pública sea fabricado y comercializado por otra compañía en el territorio nacional.
Este mecanismo parece ideado para una situación como la actual, donde algunas compañías farmacéuticas amenazan con no cumplir los acuerdos de compra anticipada de vacunas anti-COVID-19 que han firmado con la Comisión Europea.
No es fácil de llevar a la práctica
Sin embargo, su ejecución no sería en modo alguno sencilla, por varios motivos:
- Por un lado, en España no existen antecedentes de concesión de licencias obligatorias: ningún Gobierno ha recurrido nunca a este mecanismo y no existe jurisprudencia al respecto. Y enfrentarse en los tribunales a los laboratorios farmacéuticos no es fácil porque cuentan con equipos jurídicos muy cualificados.
- Por otro, la licencia obligatoria implica que un tercero se haga cargo de la producción del medicamento “licenciado”. En un contexto como el actual donde las compañías farmacéuticas con instalaciones capacitadas para la producción de vacunas son limitadas, ¿es realista plantear que alguna otra compañía pudiera, en territorio nacional, asumir la explotación de la licencia obligatoria?
- Además, paradójicamente ni España ni ninguno de los otros estados miembros de la UE pueden importar medicamentos “licenciados” obligatoriamente en otro país. En su momento, los estados comunitarios renunciaron de manera voluntaria a esta opción tal y como se recoge en el artículo 31 bis del “Acuerdo sobre los derechos de propiedad intelectual relacionados con el comercio".
Un abuso que nos perjudica a todos
¿Crees que no te afecta? Te equivocas: los elevados precios de determinados medicamentos son insostenibles para los sistemas de salud y para los usuarios. Y es un problema generalizado: los testimonios de varios expertos y pacientes en diferentes países de la Unión Europea nos muestran las consecuencias de los elevados precios de medicamentos. Por eso pedimos #medicamentosparatodos.
OCU pide un cambio
Nuestra petición se concreta en cinco puntos:
- Transparencia de los precios reales de financiación de nuevos medicamentos.
- Transparencia en los costes de investigación y desarrollo (I+D), incluidas las inversiones públicas realizadas en I+D, si las hubiera.
- Fijación de los precios de financiación de los nuevos medicamentos basados en los costes reales de I+D tanto públicos como privados.
- Poder recurrir al uso de licencias obligatorias cuando sea necesario y solicitar al Gobierno español que trabaje, en el seno de la Unión Europea, a favor de revertir la retirada voluntaria de sus países miembros de lo pactado en el artículo 31 bis del Acuerdo sobre los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio.
- Modificar la legislación de patentes aplicable a los medicamentos.
Con tu apoyo podemos conseguirlo
¿También piensas que es necesaria una mayor transparencia? ¿Un cambio de modelo de patentes de los nuevos medicamentos? ¿Y una fijación de precios de financiación basada en los costes reales de I+D? Todo eso ayudaría a los sistemas públicos de salud para poder financiar todos los nuevos medicamentos sin tener que recortar o eliminar otros servicios sanitarios. Apoya nuestra acción reivindicativa y di "no" a los precios abusivos de los nuevos fármacos: