Fin del soporte para Windows 10: ¿qué hacer?
El 14 de octubre de 2025, Microsoft dejará de ofrecer actualizaciones de seguridad gratuitas para Windows 10. Pero no todos los ordenadores pueden pasar al sistema operativo Windows 11 y muchos usuarios se verán obligados a tomar una decisión: pagar por soporte adicional, cambiar de equipo o buscar alternativas, como Linux. Te explicamos todas tus opciones.

¿Quién puede pasar a Windows 11?
El soporte para Windows 10 finaliza el 14 de octubre de 2025. A partir de esta fecha, Microsoft dejará de ofrecer actualizaciones de seguridad y soporte técnico gratuitas para Windows 10. Esto implica una mayor vulnerabilidad a ciberataques y posibles incompatibilidades con nuevos programas.
¿Cómo actualizar a Windows 11?
Todo apunta a que ha llegado el momento de dar el salto a Windows 11. Pero no todos los usuarios podrán hacerlo.
Asegúrate de que tu ordenador es compatible
Para actualizar tu PC a Windows 11, necesitas contar con un procesador (CPU) de 2018 o posterior. Pero según nuestra última encuesta de fiabilidad, hay usuarios que aún están utilizando ordenadores más antiguos: un 29% de nuestros socios usaba un portátil comprado en 2017 o antes, y solo una minoría tenía previsto renovarlo.
Por ello, si aún tienes Windows 10, primero debes asegurarte de que tu PC cumple con los requisitos mínimos del sistema para Windows 11:
- Procesador: Intel de 8ª generación (o posterior) o AMD de 3ª generación (o posterior).
- Tarjeta gráfica: compatible con DirectX 12 o posterior.
- RAM: al menos 4 GB.
- Almacenamiento: al menos 64 GB (aunque si tu disco es exactamente de este tamaño es probable que tengas que liberar parte del espacio que tienes ocupado).
- Pantalla: de alta definición (720p) de más de 9 pulgadas.
- Seguridad: Módulo de plataforma segura (TPM) versión 2.0.
Verifica si la actualización está disponible en tu PC
Muchos usuarios tienen un ordenador lo bastante actual como para permitir el upgrade gratuito al siguiente sistema operativo. Si es tu caso, automáticamente te propondrá la actualización. Solo debes usar la herramienta Windows Update de tu ordenador:
- Haz clic en el icono de Inicio de Windows
- Pulsa en Configuración
- En el menú de la izquierda busca Windows Update
- Selecciona Buscar actualizaciones
Si necesitas más información puedes consultar nuestra noticia sobre cómo actualizar a Windows 11.
Mi ordenador no es compatible: ¿que opciones tengo?
Si tu equipo no cumple los requisitos para actualizar a Windows 11, no todo está perdido. Existen varias alternativas que puedes valorar. Eso sí, no recomendamos forzar la instalación de Windows 11 si tu equipo no es compatible: podrías comprometer la estabilidad o la seguridad del sistema.
1. Pagar por seguir usando Windows 10 un año más
Microsoft ofrecerá una suscripción de pago para seguir recibiendo actualizaciones de seguridad en Windows 10. Este programa de Actualizaciones de Seguridad Extendidas (ESU por sus siglas en inglés, Extended Security Updates), proporcionará actualizaciones de seguridad críticas e importantes, pero no ofrecerá ningún otro tipo de actualizaciones ni soporte técnico.
- Usuarios particulares: 30 dólares por un año adicional de soporte.
- Empresas y organizaciones: 61 dólares por dispositivo durante el primer año y el precio se duplica cada año consecutivo, durante un máximo de tres años.
Esta suscripción es útil si quieres ganar algo de tiempo antes de cambiar de dispositivo, pero no está claro si estará disponible en todos los países ni a qué precio final.
2. Comprar un ordenador nuevo
La solución más directa es adquirir un equipo con Windows 11. No solo tendrás un aparato con mejor rendimiento y mayor autonomía, sino que además tendrás soporte de Microsoft durante años. Si te animas, puedes consultar nuestro comparador de ordenadores portátiles para encontrar el modelo que mejor se adapta a tus necesidades:
Comparador de ordenadores portátiles
Si no tenías previsto hacer ese desembolso, puedes optar por un ordenador reacondicionado: una alternativa más asequible y sostenible. Obviamente no es nuevo, pero sí han pasado unas revisiones y reparaciones… eso sí, tendrás que escoger un modelo que sea compatible con Windows 11.
3. Seguir usando Windows 10 sin actualizaciones
No te aconsejamos esta solución: si sigues usando Windows 10 sin actualizaciones extendidas de seguridad, tu equipo quedará expuesto y sin protección frente a nuevas amenazas de ciberseguridad. Sabemos por nuestros estudios de antivirus la mayoría de los ataques informáticos se centran en sistemas Windows, y los equipos sin soporte serán el objetivo principal.
Esta opción solo puede considerarse si:
- Vas a continuar usando el ordenador sin conexión a Internet.
- No conectas dispositivos externos (como memorias externas o discos duros) que puedan introducir malware.
- Tienes un antivirus actualizado instalado en el ordenador.
4. Cambiar de sistema operativo (Linux)
Si no puedes o no quieres cambiar de equipo, puedes instalar un sistema operativo alternativo como Linux. Algunas de las ventajas si das el paso:
- Gratuito y de código abierto.
- Ideal para tareas básicas como navegar, escribir documentos o ver vídeos.
- Hay versiones fáciles de usar como Linux Mint o Ubuntu, con muchas aplicaciones preinstaladas y acceso a una tienda de apps gratuitas.
Eso sí, la experiencia de uso cambia: tendrás que adaptarte a una nueva forma de trabajar y puede que algunas aplicaciones que usas en Windows no estén disponibles o tengan que sustituirse por alternativas.
La obsolescencia de Windows 10 tiene consecuencias
La obsolescencia de ordenadores como consecuencia del fin del soporte de Windows 10 genera una serie de problemas importantes, tanto para las personas consumidoras como para el medio ambiente y la sociedad en general.
- Un gran impacto ambiental. La obsolescencia de millones de dispositivos que aún funcionan genera un gran volumen de residuos electrónicos (RAEE) que pueden contaminar el suelo y el agua si no se reciclan adecuadamente en un punto limpio. Además, se desperdician recursos valiosos, ya que cada ordenador contiene materias primas críticas (como litio, cobalto, tierras raras o metales preciosos), cuya extracción conlleva un gran impacto ambiental y social y las tasas de recuperación siguen siendo muy bajas.
- Gasto para el consumidor. Muchos usuarios no contaban con tener que reemplazar su ordenador y se ven obligados a hacerlo solo por una cuestión de soporte. Esto puede representar varios cientos de euros: según nuestro estudio hay modelos asequibles (por debajo de 800 euros) que están dando buen resultado. Si es tu decisión te ayudamos a elegir el modelo que se adapta a tus necesidades.
- Desigualdad y desprotección. Los usuarios que no puedan permitirse un nuevo equipo deben elegir entre la vulnerabilidad a ciberataques o la brecha digital.
Portátiles asequibles
CALIDAD
