Osteoporosis

La osteoporosis es un proceso que afecta especialmente a las mujeres, sobre todo a partir de la menopausia. Una vez se ha declarado, no es fácil combatirla, de ahí la importancia que tiene la prevención, conocer cuáles son los factores de riesgo y actuar en consecuencia.
La osteoporosis es una descalcificación progresiva de los huesos, que puede llegar a causar fracturas y falta de movilidad. Afecta a casi 4 millones de personas en España, y se ceba especialmente con las mujeres, sobre todo con los cambios hormonales que se producen a partir de la menopausia. Una vez se ha declarado, no es fácil combatirla, de ahí la importancia que tiene la prevención, identificar los factores de riesgo y actuar en consecuencia.
- Osteoporosis: diagnóstico
- Factores de riesgo de osteoporosis
- Prevención de la osteoporosis
Con los años, el organismo deja de producir tejido óseo al mismo ritmo al que se destruye. El resultado es que la estructura de los huesos va lentamente modificándose, el interior, poroso, se hace cada vez menos denso. Esto afecta a la solidez del esqueleto. Cuando llega a un punto en que se incrementa significativamente el riesgo de facturas, hablamos de osteoporosis.
En los primeros estadios no aparecen síntomas evidentes. En general, cuando los afectados se dan cuenta de que sufren osteoporosis es cuando se producen fracturas (por ejemplo en el cuello del fémur o en la muñeca) o aparecen deformaciones en la columna vertebral motivadas por una caída o por la presión sobre el hueso.
Una radiografía ósea convencional puede detectar la descalcificación, pero puede no ser suficiente para cuantificarla. En los casos en que se sospecha osteoporosis, realizar una densitometría ósea permite valorar de forma precisa la densidad ósea lo que, en combinación con otros datos clínicos, pues llevar a hacer el diagnóstico. Es por tanto importante identificar qué personas son las que presentan un mayor riesgo de desarrollar osteoporosis.
Los primeros factores de riesgo son el sexo y la edad. La osteoporosis afecta mucho más a las mujeres, en especial las candidatas más claras a desarrollar la enfermedad son las mujeres a partir de la menopausia, pues los cambios hormonales de ese periodo afectan mucho a la densidad del tejido óseo, haciéndolas más propensas a sufrir osteoporosis. Los hombres tampoco están exentos de riesgo, pero son menos quienes sufren osteoporosis y a edades normalmente más avanzadas.
Los antecedentes familiares (por ejemplo, el historial de fracturas óseas de los padres), la historia médica personal (enfermedades, tratamientos) o las carencias nutricionales son otros factores que pueden dar lugar a una mayor propensión a padecer osteoporosis.
También influyen otros factores como el tabaquismo, la ingesta elevada de alcohol o los tratamientos crónicos con corticoides.
Afortunadamente es posible adoptar algunas medidas para prevenirla o intentar retrasar su aparición.
El mejor tratamiento para la osteoporosis es la prevención.
- Procura seguir una dieta equilibrada, con un adecuado aporte de proteínas. El consumo diario de calcio debe ser suficiente, y adaptarse a tu situación particular, a cualquier edad y desde la infancia. En determinados casos, el médico puede indicar la necesidad de tomar un suplemento de calcio.
- Evita el sedentarismo. Es aconsejable caminar entre 30 minutos y una hora diaria.
- Haz ejercicio. Para favorecer la fijación del calcio en el hueso, los mejores deportes son los que suponen que el cuerpo tome apoyo: correr, andar, saltar, aeróbic, etc. Es también recomendable que se realicen al aire libre para poder facilitar la síntesis de vitamina D a través de la piel (algo que también beneficia la fijación de calcio en nuestros huesos). Lógicamente, el ejercicio debe adaptarse a la edad y condiciones físicas de cada persona
- Evita el tabaco. Por muchos motivos, también por la salud de tus huesos, te conviene dejar de fumar.
- Evita el consumo excesivo de alcohol: más de 40 gramos diarios se considera un consumo excesivo, por lo que no se debe superar esta cantidad.
Bebida | Graduación alcohólica (100g) | Ración | Medida de la ración (ml) | Gramos de alcohol por ración |
Cerveza sin alcohol | 1,0 | caña | 200 | 1,6 |
Cerveza rubia | 4,0 | caña | 200 | 6,4 |
Cerveza negra | 8,0 | pinta | 556 | 35,6 |
Sidra dulce | 2,1 | caña | 200 | 3,4 |
Sidra natural | 3,7 | caña | 200 | 5,9 |
Sangria | 9,5 | vaso | 200 | 15,2 |
Cava o champan | 11,0 | copa | 100 | 8,8 |
Vino tinto | 13,0 | copa | 100 | 10,4 |
Vino blanco | 12,0 | copa | 100 | 9,6 |
Vino dulce | 14,5 | copa | 100 | 11,6 |
Vermut dulce | 18,2 | copa | 100 | 14,6 |
Vermut seco | 14,5 | copa | 100 | 11,6 |
Bitter con alcohol | 15,2 | vaso | 200 | 24,3 |
Licor de frutas | 20,0 | copa | 60 | 9,6 |
Ginebra | 38,0 | copa | 60 | 18,2 |
Anis seco | 40,0 | copa | 60 | 19,2 |
Brandy | 40,0 | copa | 60 | 19,2 |
Ron | 40,0 | copa | 60 | 19,2 |
Vodka | 40,0 | copa | 60 | 19,2 |
Whisky | 40,0 | copa | 60 | 19,2 |
Tequila | 45,0 | copa | 60 | 21,6 |
Datos obtenidos de las tablas de composición de alimentos del Centre d´Ensenyament Superior de Nutrició i Dietética de la Universidad de Barcelona.
- Limita el consumo excesivo de café: el consumo de cafeína ocasiona un aumento de la excreción urinaria de calcio. Tomar menos de tres tazas de café al día no parece afectar al hueso.
- Consume con moderación las bebidas refrescantes carbonatadas con ácido fosfórico (E 338): su abuso puede invertir la relación calcio/fósforo dificultando así la absorción y fijación del calcio.
- Pasea por la calle en horas de sol. En los países soleados como el nuestro, en principio el aporte necesario de vitamina D se logra con una exposición suficiente al sol. Eso quiere decir que basta con pasear por la calle. Sin embargo, deben tener precaución poblaciones de riesgo, como los ancianos que no salen a la calle, pues en su caso podría llegar a producirse un déficit de esa vitamina. Es importante incluir en la dieta alimentos ricos en vitamina D. En determinados casos, el médico puede indicar la necesidad de un suplemento de calcio o de vitamina D.
- Adapta tu entorno evitando obstáculos. Para evitar en lo posible el riesgo de caídas (especialmente en los ancianos), conviene adoptar medidas para adecuar el hogar a los mayores.
- Presta atención a la vista y el oído, ver y oír bien te ayudará a evitar caídas y las consiguientes fracturas.
La osteoporosis es una descalcificación progresiva de los huesos, que puede llegar a causar fracturas y falta de movilidad. Afecta a casi 4 millones de personas en España, y se ceba especialmente con las mujeres, sobre todo con los cambios hormonales que se producen a partir de la menopausia. Una vez se ha declarado, no es fácil combatirla, de ahí la importancia que tiene la prevención, identificar los factores de riesgo y actuar en consecuencia.
- Osteoporosis: diagnóstico
- Factores de riesgo de osteoporosis
- Prevención de la osteoporosis
Con los años, el organismo deja de producir tejido óseo al mismo ritmo al que se destruye. El resultado es que la estructura de los huesos va lentamente modificándose, el interior, poroso, se hace cada vez menos denso. Esto afecta a la solidez del esqueleto. Cuando llega a un punto en que se incrementa significativamente el riesgo de facturas, hablamos de osteoporosis.
En los primeros estadios no aparecen síntomas evidentes. En general, cuando los afectados se dan cuenta de que sufren osteoporosis es cuando se producen fracturas (por ejemplo en el cuello del fémur o en la muñeca) o aparecen deformaciones en la columna vertebral motivadas por una caída o por la presión sobre el hueso.
Una radiografía ósea convencional puede detectar la descalcificación, pero puede no ser suficiente para cuantificarla. En los casos en que se sospecha osteoporosis, realizar una densitometría ósea permite valorar de forma precisa la densidad ósea lo que, en combinación con otros datos clínicos, pues llevar a hacer el diagnóstico. Es por tanto importante identificar qué personas son las que presentan un mayor riesgo de desarrollar osteoporosis.
Los primeros factores de riesgo son el sexo y la edad. La osteoporosis afecta mucho más a las mujeres, en especial las candidatas más claras a desarrollar la enfermedad son las mujeres a partir de la menopausia, pues los cambios hormonales de ese periodo afectan mucho a la densidad del tejido óseo, haciéndolas más propensas a sufrir osteoporosis. Los hombres tampoco están exentos de riesgo, pero son menos quienes sufren osteoporosis y a edades normalmente más avanzadas.
Los antecedentes familiares (por ejemplo, el historial de fracturas óseas de los padres), la historia médica personal (enfermedades, tratamientos) o las carencias nutricionales son otros factores que pueden dar lugar a una mayor propensión a padecer osteoporosis.
También influyen otros factores como el tabaquismo, la ingesta elevada de alcohol o los tratamientos crónicos con corticoides.
Afortunadamente es posible adoptar algunas medidas para prevenirla o intentar retrasar su aparición.
El mejor tratamiento para la osteoporosis es la prevención.
- Procura seguir una dieta equilibrada, con un adecuado aporte de proteínas. El consumo diario de calcio debe ser suficiente, y adaptarse a tu situación particular, a cualquier edad y desde la infancia. En determinados casos, el médico puede indicar la necesidad de tomar un suplemento de calcio.
- Evita el sedentarismo. Es aconsejable caminar entre 30 minutos y una hora diaria.
- Haz ejercicio. Para favorecer la fijación del calcio en el hueso, los mejores deportes son los que suponen que el cuerpo tome apoyo: correr, andar, saltar, aeróbic, etc. Es también recomendable que se realicen al aire libre para poder facilitar la síntesis de vitamina D a través de la piel (algo que también beneficia la fijación de calcio en nuestros huesos). Lógicamente, el ejercicio debe adaptarse a la edad y condiciones físicas de cada persona
- Evita el tabaco. Por muchos motivos, también por la salud de tus huesos, te conviene dejar de fumar.
- Evita el consumo excesivo de alcohol: más de 40 gramos diarios se considera un consumo excesivo, por lo que no se debe superar esta cantidad.
Bebida | Graduación alcohólica (100g) | Ración | Medida de la ración (ml) | Gramos de alcohol por ración |
Cerveza sin alcohol | 1,0 | caña | 200 | 1,6 |
Cerveza rubia | 4,0 | caña | 200 | 6,4 |
Cerveza negra | 8,0 | pinta | 556 | 35,6 |
Sidra dulce | 2,1 | caña | 200 | 3,4 |
Sidra natural | 3,7 | caña | 200 | 5,9 |
Sangria | 9,5 | vaso | 200 | 15,2 |
Cava o champan | 11,0 | copa | 100 | 8,8 |
Vino tinto | 13,0 | copa | 100 | 10,4 |
Vino blanco | 12,0 | copa | 100 | 9,6 |
Vino dulce | 14,5 | copa | 100 | 11,6 |
Vermut dulce | 18,2 | copa | 100 | 14,6 |
Vermut seco | 14,5 | copa | 100 | 11,6 |
Bitter con alcohol | 15,2 | vaso | 200 | 24,3 |
Licor de frutas | 20,0 | copa | 60 | 9,6 |
Ginebra | 38,0 | copa | 60 | 18,2 |
Anis seco | 40,0 | copa | 60 | 19,2 |
Brandy | 40,0 | copa | 60 | 19,2 |
Ron | 40,0 | copa | 60 | 19,2 |
Vodka | 40,0 | copa | 60 | 19,2 |
Whisky | 40,0 | copa | 60 | 19,2 |
Tequila | 45,0 | copa | 60 | 21,6 |
Datos obtenidos de las tablas de composición de alimentos del Centre d´Ensenyament Superior de Nutrició i Dietética de la Universidad de Barcelona.
- Limita el consumo excesivo de café: el consumo de cafeína ocasiona un aumento de la excreción urinaria de calcio. Tomar menos de tres tazas de café al día no parece afectar al hueso.
- Consume con moderación las bebidas refrescantes carbonatadas con ácido fosfórico (E 338): su abuso puede invertir la relación calcio/fósforo dificultando así la absorción y fijación del calcio.
- Pasea por la calle en horas de sol. En los países soleados como el nuestro, en principio el aporte necesario de vitamina D se logra con una exposición suficiente al sol. Eso quiere decir que basta con pasear por la calle. Sin embargo, deben tener precaución poblaciones de riesgo, como los ancianos que no salen a la calle, pues en su caso podría llegar a producirse un déficit de esa vitamina. Es importante incluir en la dieta alimentos ricos en vitamina D. En determinados casos, el médico puede indicar la necesidad de un suplemento de calcio o de vitamina D.
- Adapta tu entorno evitando obstáculos. Para evitar en lo posible el riesgo de caídas (especialmente en los ancianos), conviene adoptar medidas para adecuar el hogar a los mayores.
- Presta atención a la vista y el oído, ver y oír bien te ayudará a evitar caídas y las consiguientes fracturas.