El 02/10/2025 fui víctima de un incidente de suplantación de identidad en el que se reprodujeron los entornos visuales y de comunicación de Wallapop y Cajamar.
Tras publicar por primera vez un producto en Wallapop, una usuaria identificada como “María Cojenko” (+34 632 05 35 97) contactó conmigo y, poco después, recibí un SMS con apariencia oficial de Wallapop, que incluía un enlace a una página web engañosa idéntica a la de la plataforma.
En dicha página se me solicitó introducir mis datos bancarios y aceptar un supuesto seguro anti-incidencias. A continuación, se abrieron pantallas que imitaban la web de Cajamar, donde se me indicó realizar validaciones de seguridad.
Como consecuencia, se ejecutaron tres operaciones no autorizadas de 490,09 € cada una (total 1.470,27 €), cuyos fondos fueron dirigidos a Skrill (Londres).
He presentado denuncia ante la Guardia Civil y reclamaciones ante Wallapop, Cajamar y Skrill.
En el caso de Wallapop, remití toda la documentación, incluida la hoja oficial de reclamaciones, aunque no he recibido aún información complementaria ni propuestas de actuación sobre el seguimiento del caso.
Dado que el incidente se produjo empleando la identidad visual, comunicaciones y estilo de mensajes propios de Wallapop, considero importante que la empresa refuerce sus protocolos de seguridad y autenticación, e incremente la colaboración con las autoridades y entidades afectadas para evitar que otros usuarios puedan resultar perjudicados.
Conforme a la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios (RDL 1/2007) y la normativa sobre comercio electrónico, las plataformas digitales deben garantizar la seguridad de las operaciones y la protección de sus usuarios frente a suplantaciones de identidad o comunicaciones engañosas.
Por todo ello, solicito la intervención de FACUA/Consumo para que Wallapop revise el caso, colabore en las investigaciones en curso y apoye, en la medida posible, la recuperación del importe afectado.