Estimados/as señores/as:
Los trabajadores que suscribimos esta reclamación, pertenecientes a diversas empresas que operan en el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, manifestamos lo siguiente:
Hasta la fecha, hemos utilizado los aparcamientos de empleados (P2 y Dique Sur) abonando tarifas razonables —20 € por 10 usos o 40 € por 20 usos— en condiciones adecuadas de proximidad, disponibilidad y acceso.
• A partir del 1 de junio de 2025, AENA ha comunicado el traslado obligatorio de todos los empleados externos a aparcamientos más alejados (P5 y P10), alegando una supuesta falta de espacio que no se corresponde con la realidad observable, ya que existen numerosas plazas libres en los aparcamientos originales.
• Paralelamente, se ofrece la posibilidad de permanecer en los aparcamientos anteriores mediante el pago de una tarifa mensual de 70 €, lo cual constituye una modificación unilateral, desproporcionada y económicamente gravosa de las condiciones de uso vigentes.
• Se ha establecido, además, un nuevo precio de 35 € por cada bloque de 10 usos. Considerando que la mayoría de los empleados acudimos a nuestro puesto de trabajo una media de 17 días al mes, esta opción resulta totalmente inadecuada. Para cubrir dicha frecuencia, es necesario adquirir dos bloques (70 €), coincidiendo exactamente con la tarifa mensual, lo que evidencia una falta de coherencia en el sistema.
Esta medida penaliza a quienes no trabajan todos los días del mes, sin ofrecer opciones flexibles ni un modelo ajustado al uso real del servicio.
Esta situación perjudica gravemente nuestros desplazamientos diarios, imponiendo un incremento de costes injustificado y sin garantías de mejora en el servicio.
Además, si se pretende implantar una tarifa de 35 € por cada 10 usos, lo mínimo exigible es que el servicio se preste en condiciones dignas. Actualmente, el aparcamiento P2 presenta con frecuencia basura, suciedad y una evidente falta de mantenimiento. A ello se suma que los cargadores para vehículos eléctricos situados en los bloques C y B, en la primera planta, llevan más de un año sin funcionar. En estas circunstancias, resulta inadmisible plantear una subida de precios sin una mejora mínima de las condiciones ofrecidas, especialmente cuando no existe una justificación real en términos de falta de espacio.
Resulta especialmente llamativo que, con la nueva tarifa mensual de 70 €, el coste por aparcar en el recinto laboral supere incluso el precio medio de una plaza de garaje en régimen de alquiler en muchas zonas residenciales de Madrid.
Es paradójico que acudir al propio puesto de trabajo implique un gasto superior al que afrontan quienes alquilan una plaza privada de uso permanente. Esta desproporción evidencia la falta de equilibrio y razonabilidad en la medida propuesta.
Cabe recordar que los empleados no acudimos al aeropuerto con fines de ocio ni con márgenes de tiempo excesivos, como sí lo hacen los pasajeros. Vamos a cumplir con nuestras funciones, y exigimos poder hacerlo en condiciones razonables.
En el sector de la aviación, cuando una empresa concede tan solo una hora de margen para acudir estando de guardia, el uso de aparcamientos alejados hace inviable el cumplimiento de los tiempos requeridos. Esto afecta especialmente a quienes viven lejos del aeropuerto. Los trayectos incluyen vestirse, preparar comida, prever posibles atascos, aparcar, caminar hasta 20 minutos o esperar entre 5 y 10 minutos al autobús lanzadera hasta la terminal, pasar controles de seguridad y dirigirse a la puerta de embarque. Las nuevas condiciones dificultan gravemente todo ese proceso sin ofrecer soluciones reales.
Confiamos en que estas observaciones sean tenidas en cuenta antes de aplicar cualquier modificación, ya que, en las condiciones actuales, la medida resulta desproporcionada y difícilmente justificable.
SOLICITO
• Que se investigue y revise esta modificación de condiciones por posible abuso y alteración unilateral de los términos de acceso al centro de trabajo.
• Que se adopten medidas urgentes para proteger los derechos de los trabajadores afectados.
• Que se modifique el precio por usos, ya que carece de sentido establecer 35 € por 10 usos, obligando a recargar pasados diez días laborables y coincidiendo con el importe de la tarifa mensual.
• Que se garantice la posibilidad de seguir utilizando los aparcamientos más próximos sin un coste abusivo, mientras existan plazas disponibles.
• Que se nos justifique de manera transparente la razón real del incremento de precios, dado que la supuesta falta de espacio no se ajusta a la realidad observable.
• Que se garantice una limpieza regular y adecuada del aparcamiento, ya que la acumulación de suciedad se ha convertido en una constante inaceptable en los últimos meses.
Adjuntamos listado de firmantes, copias del comunicado oficial, justificantes de tarifas anteriores y futuras, así como pruebas fotográficas que evidencian tanto la disponibilidad real de plazas como el estado de suciedad persistente del aparcamiento P2.
Sin otro particular, atentamente.