Buenos días les escribo para expresar mi queja por el ruido que generan todo los días, las locomotoras diésel de los trenes Madrid-Salamanca, que se han desplazado desde la estación de Chamartin a Principe Príncipe Pío. El ruido es altísimo durante una media de 30 minutos, que es el tiempo que permanecen las locomotoras con los motores encendidos, con una frecuencia de varias veces al día. Los ruidos empiezan alrededor de las 7 por la mañana hasta las 23 horas. El ruido y las vibraciones son constantes hasta con ventanas y persianas cerradas, pero con las ventanas abiertas el ruido es insoportable. A parte del ruido, las locomotoras liberan gran cantidad de humo negro de combustión del diésel generando una importante contaminación del aire, siendo nítidamente visible por el polvo retenido en las ventanas y en la ropa tendida en la terraza.