Este escrito tiene por objeto exponer la problemática que ha surgido con la empresa JAZZTEL y por la cual la misma me está reclamando 552,93 €.Mi primo trató de realizar una portabilidad desde la empresa ONO hacia la empresa JAZZTEL, tanto para la línea de telefonía móvil como la línea de Internet. Para hacer dicha gestión se puso en contacto con él una trabajadora de la empresa JAZZTEL, la cual dice llamarse Raquel. Esta trabajadora informa a mi primo que no se le permite realizar la portabilidad, ya que tiene una incidencia anterior con JAZZTEL por un impago que se deriva de un equipo no devuelto. En este punto señalar que ese equipo si se devolvió a través de correos, siendo que posteriormente JAZZTEL reclamó el recibo de dicha devolución, el cual no se pudo entregar al no haber recibido recibo alguno por parte de correos. La trabajadora de la empresa JAZZTEL llamada Raquel comenzó una serie de conversaciones a través de la aplicación WHATSAPP, así como audios. En dichas conversaciones y audios, Raquel le pedía a mi primo que utilizase los datos de cualquier otra persona a modo de titular, poniendo su propia dirección y número de cuenta para recibir así el servicio solicitado. Incluso llegó a ofrecer los datos de un amigo suyo (de la propia trabajadora) para poder crear así un cliente ficticio con los datos de una persona como titular, completando los datos de domiciliación de pagos y de recepción de servicios a nombre de mi primo. Esto último nunca llegó a concretarse, ya que Raquel no llegó a utilizar a ningún amigo suyo para este fin, pero sí que insistió que era una práctica muy común hacer este tipo de cuentas de cliente. Finalmente, mi primo decide hacer caso a la trabajadora de la empresa JAZZTEL y me solicita utilizar mis datos para formalizar este contrato. La trabajadora de JAZZTEL realiza las gestiones oportunas para terminar realizando el contrato al efecto. A finales del mes de septiembre del año 2019, mi primo comienza a disfrutar de los servicios de JAZZTEL, tanto en telefonía móvil como en acceso de Internet. El 23 de octubre del año 2019, JAZZTEL comienza a mandar mensajes de texto a la línea de Carlos Navarro Ballesteros informando de que se va a proceder a cancelar la tarjeta SIM de su línea, así como se va a proceder a tramitar la baja con la empresa. Los mensajes dicen que esa baja ha sido solicitada por el titular y que los gastos de causar baja antes de finalizar la permanencia ascienden a 627,08 €, pero ni mi primo ni yo, solicitamos baja alguna. Poseo adjuntos de conversaciones y audio de dicha comercial.Se produce la baja de esos servicios, y la línea de mi primo quedan sin servicio.Mi primo se pone en contacto con la compañía JAZZTEL y con la trabajadora de la misma, Raquel, para tratar de averiguar la problemática. Raquel le dice que existe una irregularidad por riesgo de estafa. Tanto Raquel como los diferentes interlocutores de la empresa que hablan con mi primo, reiteran al mismo que envíe por fax los datos del titular y los datos bancarios para restablecer la línea. Se hizo esta gestión hasta en cuatro ocasiones, siendo que JAZZTEL nunca restableció la línea móvil ni la línea de Internet.Durante este proceso, la empresa JAZZTEL había cobrado la mensualidad de octubre del año 2019, y la de noviembre, siendo que esta última no se debería haber cobrado al entenderse de baja el servicio.La trabajadora de la empresa JAZZTEL, Raquel, aconseja a Carlos Navarro Ballesteros que devuelva los recibos cobrados por la empresa JAZZTEL y que de orden al banco de que no se cobre nada más por parte de esta empresa. Así obra, ya que la empresa JAZZTEL seguía cobrando un servicio que no ofrecía, y que se había cortado el 23 de octubre del 2019. Todo esto no se realiza sin estar durante un mes entero tratando de recuperar la línea, y realizando cada gestión que la empresa reclamaba para solventar el problema.El 27 de diciembre del año 2019, mi primo recibe por correo una carta de la empresa ISGF a mi nombre, en la que se insta a pagar 552,93 euros en los próximos 10 días por una deuda contraída por el mismo, informando en este mismo correo de las consecuencias que se derivaran al no hacer dicho pago. Comienzo a recibir llamadas de teléfono de la empresa ISGF en los mismos términos, sin llegar a explicar el motivo de la problemática. Cada vez que se trata de explicar la situación, dicha empresa se cierra en banda, y amenaza con incluir mis datos en un archivo de morosos, así como denunciar en el Juzgado para reclamar dicha deuda.Ante todo lo relatado, y como resumen, puntualizo: 1. La empresa JAZZTEL me reclama el pago de una pronta finalización de un contrato de un servicio que él no solicitó, y que el solicitante no disfrutó en condiciones. 2. La empresa JAZZTEL cancela el servicio prestado a la línea de mi primo alegando un posible riesgo de estafa, siendo que las gestiones practicadas para darle servicio se realizaron bajo las instrucciones de una trabajadora de la propia empresa JAZZTEL. 3. La empresa JAZZTEL reclama una deuda, no poniéndose de acuerdo en el valor de esta deuda, siendo que en los diferentes intervalos en los que se exige este pago, las cifran que solicitan son diferentes. 4. La empresa JAZZTEL en ningún momento se pone en contacto conmigo para informar de nada de todo lo aquí relatado, siendo que cuando éste trata de informarse, tampoco se le facilitan datos de lo sucedido. 5. Una empresa de cobro a morosos, ISGF, intercede en nombre de la empresa JAZZTEL para cobrar la deuda mencionada, amenazando con denuncias judiciales y con incluir los datos de José Navarro González en un archivo de morosos. Todo ello sin aportar los motivos de todo esto, y sin permitir que se pudieran aportar explicaciones. 6. Trato de solucionar el problema contactando con la empresa JAZZTEL y la misma no facilita una vía para el diálogo. Por todo lo expuesto, SOLICITO ser eliminado como deudor de la empresa JAZZTEL.