Esta mañana (12/01/2024), he intentado comprar dos entradas para el partido entre el Atlético de Madrid y el Inter en el Metropolitano. He accedido a la página oficial del Atlético de Madrid. En el momento de proceder al pago, se me redirigió a VIAGOGO.Durante todo el proceso de pago de las entradas, pensaba que era la plataforma de pago del Atlético. En el proceso de pago, emergió un aviso de actividad peligrosa (el cual me extrañó), pero se permitió continuar con el proceso. Sin embargo, al recibir el correo electrónico de confirmación del pedido, pude comprobar que me lo enviaba VIAGOGO (en lugar del Atlético de Madrid, que era a quien pensaba que había comprado las entradas).Además, también pude comprobar que en el correo electrónico recibido, no se me facilitaba ninguna entrada. No se me entregaba ninguna entrada física, ni electrónica (PDF), ni siquiera una localidad en la que fuera conocida su ubicación en el estadio (asiento, fila, zona del campo... nada).Al investigar, he comprobado que VIAGOGO no es sino una plataforma de venta de entradas de segunda mano.He reclamado a VIAGOGO la ANULACIÓN DEL PEDIDO Y LA DEVOLUCIÓN DEL IMPORTE (el cual, actualmente se encuentra retenido por mi banco), porque: a) Sospecho y temo que los datos de mi tarjeta hayan sido vulnerados (porque en el momento de realizar la compra emergió un mensaje de vulneración de seguridad). Además, en ningún momento se activó el protocolo de COMERCIO ELECTRÓNICO SEGURO (no hubo confirmación del pedido a través del habitual uso de claves). b) No se me ha facilitado ninguna entrada conocida. Es decir, no he comprado nada. VIAGOGO sólo me dice que las entradas se me entregarán electrónicamente en la semana anterior al evento. Por tanto, NO PUEDO VENDER NADA (que es la única alternativa o solución que me ofrece, revenderlas). Además, yo no quiero entradas de segunda mano NI VENDER NADA QUE NO TENGO. c) El pago está retenido por mi banco. Es decir, no se ha hecho efectivo ningún pago. Por tanto, no debe haber inconveniente en que VIAGOGO no lo cobre finalmente. De hecho, he dado órdenes a mi banco para que bloquee la cantidad retenida y se interponga una reclamación.