En mayo de 2024 contraté una suscripción anual denominada "anual 15" por importe promocional de 15€, según las condiciones particulares del correo de confirmación de compra recibido el 30/05/2024 no se contemplaba renovación automática ni modificación del precio pactado.
Sin embargo, en junio de 2025, sin aviso previo ni consentimiento, se me cargó la cantidad de 99,90€, correspondiente a una nueva factura que contiene incongruencias: se factura bajo el concepto "Suscripción Anual Próximo año 15€", pero el importe cobrado asciende a 96,06€ más IVA, lo que contradice el importe promocional pactado inicialmente. Por tanto, estamos ante una nueva contratación o una renovación unilateral. Vulnera mis derechos contractuales y como consumidor, dado que las condiciones generales de la empresa, al no haber sido negociadas ni aceptadas expresamente, no son de aplicación y exigen, incluso en su propio texto, una comunicación previa y clara del importe total antes de la contratación.
Ante la falta de consentimiento, la ausencia de información previa y la actuación unilateral de La Vanguardia, procede la devolución del cargo bancario y la anulación de la factura emitida. Pues no existe contrato y no es justificable el cobro por no haberse contratado. Además, las propias condiciones generales contemplan el derecho de desistimiento, por lo que si estuviéramos ante una nueva contratación, como es el caso, podría desistir y deberían devolver el dinero cobrado. ¡Pero nunca se ha contratado una suscripción para el periodo que se cobra!