A la atención del Departamento de Atención al Cliente de
El Corte Inglés Sanchinarro
C/ Margarita de Parma, 1
28050 Madrid
Madrid, 14 de mayo de 2025
Estimados/as señores/as:
Me dirijo a ustedes como cliente habitual de El Corte Inglés para presentar una queja formal relacionada con la marca “THE-ARE”, que opera dentro de sus instalaciones, concretamente en el centro de Sanchinarro.
El día 13 de mayo de 2025, aproximadamente a las 20:00 horas, acudí al mencionado centro para devolver un vestido de fiesta adquirido días antes en el stand de dicha marca del Corte Ingles de Goya. Mi solicitud fue rechazada de forma absolutamente inapropiada por parte de la dependienta identificada como Camila, quien me increpó en voz alta delante de otros clientes, afirmando de manera tajante y sin pruebas que el artículo había sido usado, y negándose a gestionar la devolución.
Este comportamiento no solo fue ofensivo y humillante, sino que además constituye una vulneración de mis derechos como consumidor, recogidos expresamente en la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios (Real Decreto Legislativo 1/2007). Dicha normativa protege al cliente frente a cláusulas abusivas, trato denigrante y políticas de devolución opacas o restrictivas, especialmente cuando el producto se encuentra en perfecto estado, tal y como era el caso.
Además, tras investigar más a fondo, he comprobado que no se trata de un hecho aislado. Existen numerosas reseñas públicas en plataformas como Google Reviews que denuncian prácticas similares por parte de “THE-ARE” en distintos centros de El Corte Inglés, tanto en tienda física como en venta online. Entre las prácticas más repetidas se encuentran:
Rechazo sistemático de devoluciones, incluso cuando se cumple el plazo legal.
Acusaciones infundadas de uso del producto para justificar la negativa.
Trato despectivo hacia los clientes.
Este tipo de actuaciones no solo vulnera derechos fundamentales del consumidor, sino que también perjudica seriamente la imagen de confianza, profesionalidad y servicio al cliente que El Corte Inglés ha cultivado durante décadas. Considero especialmente preocupante que se permita a marcas externas operar con prácticas ajenas a los estándares que se esperan de su compañía.
Por todo ello, solicito formalmente:
Una disculpa oficial por el trato recibido.
La aceptación inmediata de la devolución del producto conforme a lo estipulado en la ley.
Una investigación interna sobre las prácticas de “THE-ARE” en sus centros.
Que se exijan a dicha marca el cumplimiento estricto de las normas de consumo vigentes, así como de las políticas de atención al cliente de El Corte Inglés.
En caso de no recibir respuesta o solución en un plazo razonable, me veré en la obligación de elevar esta reclamación a organismos de consumo competentes, como la Dirección General de Comercio y Consumo de la Comunidad de Madrid, y valorar otras vías legales.
Agradeciendo de antemano su atención, quedo a la espera de una respuesta.
Atentamente,
Sara Cebrian