Buenos días. El pasado 19 de abril sobre las 11:30, acudí a la oficina del Banco de Santander sita en Pº Independencia 34 (cercana a mi residencia habitual), para iniciar el trámite de asumir la herencia materna existente en este banco, consistente en el importe de una cuenta corriente y en la mitad de unos valores, ubicados en la sucursal del Santander en Calatayud, pertenecientes ambos a mi difunta madre.Acudí a esa sucursal con la documentación necesaria y ya cursada notarialmente, consistente en la Manifestación, Aceptación y Adjudicación de Herencia, así como el Impuesto de Sucesiones y Donaciones Autoliquidación Sucesiones.Fui atendido por una señora/señorita a quien indiqué que pretendía cursar la documentación que acabo de citar a la sucursal del Santander de Calatayud tal como había hecho con otra parte de herencia el día anterior en otro Banco y sin ningún problema. La persona que comento que me atendió utilizó desde el primer momento un tono de superioridad y despectivo, totalmente inapropiado para alguien que trabaja de cara al público. Tras reiterarle mis lógicas pretensiones finalmente accedió a escanear mis papeles y enviarlos a Calatayud por el motivo indicado.Cuando regresó a la mesa tras realizar las acciones citadas, su tono había cambiado radicalmente, mostrándose a partir de entonces con un trato ya normal hacia mí. Me explicó que ya había enviado todo a la sucursal que yo solicité y me ofreció a firmar una única hoja sin numeración con el argumento de que era mi petición de tramitación de recepción de la herencia de mi madre ya comentada. Eché un vistazo a la hoja en la que figuraba la aportación de documentación ya hecho por mi gestoría u otra no necesaria. En la parte inferior de la hoja constaba mi autorización al Grupo Santander para que contacte conmigo si necesita alguna documentación para el trámite y la constancia del conocimiento por mi parte de un servicio telefónico de atención al heredero, cuestiones que no me extrañaron, por lo que firmé al pie de, repito, ESA ÚNICA HOJA SIN NUMERAR.La mujer que me atendía me ofreció amablemente un pos-it con un contacto en la oficina de Calatayud de quien podía llevar estos asuntos, mientras grapaba y me entregaba una copia de la hoja que yo había firmado junto a tres más, con la única explicación de que era el resto de información sobre el asunto en trámite.Al día siguiente ya con calma leí las cuatro páginas y observé que en la primera de ellas, no la firmada por mí, figuraba que yo había sido informado de la existencia de una comisión de 90 euros más los impuestos...por el asesoramiento u orientación jurídica... y que si existían valores, como es el caso, he sido informado de que la comisión es del 1% sobre el valor de los mismos.... Ambos postulados son falsos pues no fui informado de ninguna de las dos comisiones que por otro lado juzgo innecesarias pues la documentación que yo entregué ya estaba elaborada jurídica y notarialmente. En cualquier caso, la sra./srta. que me atendió NO ME INFORMÓ EN NINGÚN MOMENTO de la existencia de esas comisiones.Si la oficina donde se produce la gestión tiene cámaras pendientes de la mesa donde estuve, seguró podrán comprobar que quien me atendió solo me ofrece una única hoja y que solo recibo las otras 3 hojas en el último momento sin comentario alguno sobre ellas salvo que era el resto de la información sin más.Si además la oficina tuviese audios, se podría constatar sin ninguna duda que no fui informado en ningún momento sobre las comisiones mencionadas.Ante este atropello que he sufrido por parte de su empleada y por tanto por parte de su entidad, solicito que sean anuladas las comisiones mencionadas por incumplimiento de su deber de información o, si no se avienen a ello, se anule de inmediato la tramitación de testamentaría de este asunto.Espero su decisión, un saludo.