Estimados/as señores/as: Con fecha 28 de abril Ana María García Fernández firmó un contrato para la compra de una pérgola que se instalaría en su piso, situado en Calle Dinastía Músicos Palatín, Sevilla.El día acordado para la instalación de la misma fue el 15 de junio. En el contrato figuraba el desmontaje del toldo y materiales preexistentes para la instalación de la nueva pérgola. El día 13 de junio fueron dos personas a subir los materiales. Los materiales fueron subidos con una correa y de forma peligrosa a través de la fachada del edificio. Tras retirar los materiales preexistentes y pagarles los 200€ acordados, no se llevaron el material preexistente dejándolo en la terraza. La afectada comunicó su disconformidad con este hecho y pidió que fuesen retirados el día del montaje, 15 de junio.Ese mismo día un vecino del bloque puso una queja ya que al subir los materiales los operarios le habían hecho un desperfecto en su terraza. Nunca se puso solución a este problema ocasionado, siendo responsabilidad de la compañía de montaje.El día 15 de junio, cuando vinieron a montar los materiales, los operarios se dieron cuenta que la pérgola que habían traído para montar, no era la que se había contratado ni tenía las medidas acordadas. Era un error por parte de la compañía. Aseguraron que la compañía iban a contactar con la afectada para poner una solución mientras se solicitaba la pérgola contratada.El día 20 de junio la afectada fallece, sin haber recibido una solución y teniendo la terraza descubierta al sol, en pleno verano. Yo, Teresa García, hermana de la fallecida, me pongo en contacto con la empresa preguntando cuándo llegará la solución prometida y la pérgola contratada. Al no recibir una solución ni una respuesta clara, y ante el fallecimiento de la contratante y afectada, solicité por teléfono y por whatsapp, la cancelación y resolución del presente contrato.Tras continuada insistencia por mi parte, el 8 de agosto el comercial que realizó la venta me confirma por whatsapp, que tras el fallecimiento de la contratante y la solicitud de resolución del contrato, él renunció a su comisión de venta para facilitar la devolución de la pérgola y la finalización del contrato.El pago de la pérgola, que ascendía a 10.375€, había sido financiado en tres plazos por la financiera Cetelem. El primer pago no se realizaría hasta el montaje de la pérgola. Desde el día 20 de junio fecha del fallecimiento, y hasta día de hoy 31 de agosto, la cuenta de la fallecida donde se habían domiciliado los pagos, se encuentra bloqueada por la entidad como es habitual en estos casos, hasta que se haya arreglado la documentación pertinente que normalmente tarda meses en tramitarse. Es por este motivo que los dos primeros cargos de la pérgola han sido devueltos por la entidad financiera al no tratarse de domiciliaciones recurrentes, como sería el caso de hipoteca o suministros básicos.Se ha puesto en conocimiento de la financiera Cetelem, la situación, las reclamaciones y la intención de la resolución del contrato con Lumon, por incumplimiento del mismo y negligencias varias citadas anteriormente.Tras numerosas llamadas y mensajes enviados, a fecha de hoy, 31 de agosto y tras más de dos meses de espera, sin recibir solución por parte de la empresa Lumon, solicito la resolución del contrato por parte de dicha empresa.Vuelvo a solicitar por esta vía ya través de la Organización de Consumidores y Usuarios, la resolución del contrato y la anulación de los pagos correspondientes. Sin otro particular, atentamente.Teresa García Fernández.