Estimados/as señores/as:
Me pongo en contacto con ustedes porque su empresa ha modificado la dirección de entrega de un paquete sin mi consentimiento y se niega a entregarlo en la dirección original contratada para el servicio.
Dispongo de un email informando que al día siguiente se va a producir la entrega de un paquete en mi dirección. La misma sale cortada, imagino que por un problema por el nº de caracteres, problema imputable única y exclusivamente a GLS puesto que el nombre de la calle cambió en 2017, es inexplicable que no haya actualizado sus sistemas para adecuarlos a la longitud de las calles existentes.
El día de la entrega recibo un email diciendo que mi paquete está listo para recoger en una tienda.
Tras contactar a atención al cliente via red social X (anteriormente Twitter) me responden diciendo que no me lo van a entregar, que si no voy a por el que lo devuelva.
SOLICITO la entrega del paquete. En su defecto que GLS se encargue de la devolución del mismo y un nuevo envío, el paquete procede de Dinamarca. Ya que el error viene de GLS y sus sistemas, el consumidor no tiene por qué realizar acciones adicionales, ya es bastante perjuicio no disponer del paquete en la fecha contratada.
También solicito la actualización de los sistemas para que no vuelva a pasar, como un entrenamiento adecuado al personal de atención al cliente sobre como resolver incidendias generadas por la propia empresa no imputables al consumidor.
Por último me gustaría solicitar una investigación interna, ya que algún empleado ha tenido que tomar la decisión de cambiar la dirección de entrega unilateralmente.
Sin otro particular, atentamente.