El día 1 de diciembre a mi hija se le rompe la lavadora y por la urgencia, ese día compra otra en Mediamark. Nosotros vivimos en Córdoba, ella por cuestiones laborales se ha ido a vivir a Mostoles. Es joven, sola, en un lugar que no conoce, que se va adaptando poco a poco. Por ello al comprarla se decidió pagar 29€ más, para que se la dejaran instalada y evitar problemas. El día 4, se la entregaron, y se la instalaron. Cuando ella, horas más tarde fue a usarla, no funcionaba. Aparace el error que indica que no entra agua. Desde Córdoba le indica su padre que moviese el mango del grifo, no tenía, pero como puede lo intenta. Sin resultado Ese mismo día llamamos al 900205000, toman nota, pero no pasa nada. Entre María (mi hija) y yo seguimos llamando durante tres semanas. NADA. Sigue lavando a mano. El día 15, va a la tienda, y le dicen que tendrá que llamar a un fontanero y pagarlo. Una barbaridad. Le vuelve a explicar lo ocurrido pero nada. Tengo que decir, que parece que puede ser que Candy llamara dos veces en días dintintos, pero solo una vez, no son lo suficientemente responsables de repetir la llamada unos minutos más tarde. Porque no siempre se tiene el teléfono al lado y se llega tarde a coger la llamada. Así que no pudo hablar con ellos. Como después de tres semanas, mi ultimo aviso fue el día 18, la situación seguia igual y dandonos cuenta que no iban a asumir su responsabilidad, su padre se trasladó a Mostoles para solucionarlo. El problema era que cortaron el grifo de agua para quitar la lavadora averiada y al instalar la nueva se les olvidó dejar el grifo abierto. Se presentaron en casa cerca de las 15,00 y con las prisas, se les olvidó. Eso le puede pasar a cualquiera somos humanos, pero cuando hay un error hay que responder y resolverlo. Para su padre tampoco fue facil, tubo que tomar medidas de seguridad, y necesitó de una llave inglesa para poder mover el grifo. Es inadmisible, horrible, la experiencia que hemos tenido, por eso desde aquí reclamo la devolución de los 29 euros, que le han cobrado, porque el trabajo no se terminó. Se pago para nada. Tambíen les debería de costar algo tanto daño producido, que todo esto nos lo hubiésemos podido ahorrar, si hubiesen atendido, solo se necesitaba la presencia de una persona para comprobar la instalación realizada. Espero que con este escrito se den cuenta del mal hecho, y que, esta vez actuen como es debido.