La web confunde al cliente, ya que crees que estás comprando entradas en la web oficial del Vaticano. En mi experiencia me he sentido engañado desde julio hasta finales de septiembre, que finalmente he conseguido recuperar el dinero que pagamos en julio. Después de multitud de correos, cuadro días antes de la entrada al Vaticano, conseguí recibir una respuesta indicándome que el pedido no se había procesado en su día y por lo tanto no teníamos entradas, indicaron que nos devolverían el importe pagado, hemos tenido que esperar 15 días después de también varios correos. Pero finalmente recibir el importe integro.
Te sientes frustrado, ya que escribes y únicamente recibes respuesta de una máquina con un mail tipo.
Nada recomendable