Nos expidieron una factura de más de 630 euros de aranceles relacionada con un envío del cual ya se abonó una factura de aranceles de más de 700 euros. Tras múltiples llamadas y reclamaciones, dijeron que pasaban el caso al departamento correspondiente para que investigara lo ocurrido. Dos años después y sin tener ninguna noticia suya, sus servicios jurídicos nos reclaman de nuevo la factura con amenazas de emprender acciones legales contra nosotros. Y lo mejor de todo: en atención al cliente nos informan de que la factura que nos reclaman está relacionada con un envío de 2025 entre localidades de Estados Unidos, cosa imposible porque nosotros vivimos en España. Una factura de 2023 relacionada con un envío de 2025: un sinsentido.