Estimados señores,
Por medio de la presente, me dirijo a ustedes para manifestar mi descontento y presentar una reclamación formal respecto al servicio prestado y al producto adquirido, en concreto un calentador que nos fue vendido inicialmente el día 22 de enero de 2021 por un valor de 690 euros.
Desde la adquisición, dicho producto ha presentado múltiples defectos de fábrica que ustedes conocían, ya que en dos ocasiones fue necesario reemplazarlo debido a su mal estado. Finalmente, nos fue instalado un calentador que también sabían estaba en mal estado, dicho por su propio servicio técnico el 17 de enero de 2025. Este dispositivo se ha estropeado poco después de finalizar el período de garantía, lo que evidencia un defecto preexistente en el producto.
El día 17 de enero de 2025, tras reportar nuevamente la avería del calentador, su empresa procedió a cobrarnos 800 euros por un nuevo calentador. Este proceder no solo resulta inadmisible, sino que constituye una práctica claramente engañosa y abusiva, pues consideramos que se nos ha vendido de manera deliberada un producto defectuoso en repetidas ocasiones, con pleno conocimiento por parte de su empresa de su mal estado. Esto demuestra una evidente intención de aprovecharse económicamente de la situación, incumpliendo con los principios básicos de calidad, durabilidad y buena fe comercial, lo cual es totalmente calificable como una estafa hacia el consumidor.
Por todo lo anterior, solicitamos el reembolso completo de la segunda factura por valor de 800 euros debido a la negligencia y falta de cumplimiento de sus responsabilidades como proveedor del producto.
