PÓKER EN CASINO GRAN VÍA DE MADRID - AMBIENTE DE MOTEROSSoy aficionado al póker. Como tantos otros, no puedo jugar en mesas de cash porque eso es para gente que puede gastar mucho dinero. Por eso juego en los torneos. He jugado en varios países. Nunca he visto algo como lo que se ve en los torneos de póker del casino Gran Vía de Madrid.Intentaré describirlo cuidadosamente.Estoy en una mesa con otros 8 jugadores. A mi alrededor hay otras cuatro mesas en la misma zona de la Poker Room. A mí derecha, dos jugadores compiten por monopolizar los chistes en la mesa durante el juego, sin cesar de hablar. Hablan también de las propias jugadas, de las manos que tienen, y lo hacen tranquilamente durante la jugada, tanto si ellos están en la misma como si no están. El crupier no dice ni una palabra, al contrario, compadrea con ellos y a veces les ríe las gracias o les retroalimenta la conversación.A mi derecha inmediata, el jugador A ahora quiere destacarse más. Se pone a gritar (sí, gritar) a un jugador de otra mesa, a un volumen que sencillamente le oyen en todas las mesas, las cercanas y las lejanas. La experiencia en ese momento es pésima. No sólo no puedo disfrutar de una mesa de póker normal, tengo un macarra al lado que grita como un energúmeno. ¿Le llama alguien la atención? ¿Le llama alguien al orden? En absoluto, no sólo no le dicen nada sino que nuevamente el crupier le ríe las gracias.Ahora el jugador A está disfruntando porque desde una mesa lejana le han oído y le han respondido, así que él responde al jugador B de la otra mesa ¡Que te den por el culo! y hay sonoras carcajadas de varios de sus amigos.Hay una mujer en la mesa, que desvía la mirada al techo, observo su disgusto pero no dice nada, supongo que porque hay varios jugadores riendo estas gracias.Estos comportamientos continúan durante al menos dos horas seguidas en las que estuve en la mesa, y pude observar lo mismo en la mesa del jugador B, porque también gritaban y hacían comentarios vulgares y soeces de todo tipo.Como decía he jugado en la poker room en varias ciudades, nunca he visto algo tan exagerado.No me sorprende en absoluto que en la Poker Room de un casino entren jugadores maleducados y que se comporten así, eso el Casino no lo puede evitar, pero ¿es normal que el coordinador del torneo permita estos comportamientos?¿Al Casino Gran Vía le interesa que sus torneos tengan un ambiente de taberna de moteros?¿Al casino le interesa que delante de una mujer un jugador pueda gritar Que te den por el culo a otro de otra mesa y que el crupier le ría la gracia?¿Tiene alguna idea el Casino Gran Vía de cuántas personas en ese torneo pensaron como yo? Porque una regla básica de atención al cliente es que cuando alguien pone una reclamación como esta hay otros 100 que piensan lo mismo pero no reclaman, ya sea por su personalidad, por temor, o por tener la oportunidad o el medio.¿Se le ha ocurrido a los responsables de la Poker Room hacer una encuesta anónima a los jugadores y preguntarles por el ambiente de las mesas en las que juegan?¿Se les ha ocurrido pensar qué imagen está dándose del casino con esta falta de profesionalidad?En resumen, yo en el lugar del responsable del casino me preguntaría si dejo el ambiente del torneo en manos de unos pocos jugadores y sus amigotes o si prefiero esforzarme en controlar el ambiente dentro de unos límites, de modo que nadie piense que su poker room es en realidad una taberna de macarras.