Estimados/as señores/as:
En relación con el parte Nº 1.238.559/2025 y en respuesta a su solicitud, contacté con la empresa que realizó la instalación de los aires acondicionados en mi vivienda. El técnico correspondiente me redactó el informe que adjunto a este correo.
Les escribo como asegurado de Mutua Madrileña, con un seguro de hogar en vigor y otros tres productos contratados con ustedes. En mi domicilio cuento con dos equipos de aire acondicionado seminuevos que, tras el apagón ocurrido recientemente, no habían sido utilizados. Durante la primera semana de junio, al intentar encenderlos, uno de ellos se encendió sin enfriar, y el otro directamente no funcionó. Me puse en contacto con la empresa instaladora, que me indicó que el apagón podría haber provocado una avería eléctrica.
Posteriormente, comuniqué la incidencia a Mutua Madrileña. Ustedes enviaron a un técnico, quien confirmó que se trataba de un fallo eléctrico derivado del mencionado apagón y me indicó que el seguro cubriría la reparación o se ofrecería una indemnización para asumir los costes. Sin embargo, tras semanas sin recibir respuesta clara —en plena ola de calor, con temperaturas que superaban los 40 °C en Murcia— fui informado de que el caso sería reclamado a la compañía eléctrica. Finalmente, el día 30 de junio se me notificó que el siniestro quedaba fuera de cobertura, argumentando que se trataba de un desgaste de los aparatos y no de una avería eléctrica.
Esta decisión me resulta contradictoria, considerando que el técnico enviado por Mutua Madrileña señaló expresamente que el fallo era consecuencia directa del apagón, mencionando posibles daños en la placa base o los fusibles, sin llegar siquiera a desmontar los aparatos.
Siguiendo nuevamente sus indicaciones, contacté de nuevo con la empresa instaladora. Revisaron ambos equipos y redactaron un segundo informe técnico. El aparato del salón fue finalmente reparado —la avería provenía del receptor del mando a distancia— sin coste alguno, en atención a las molestias ocasionadas. Sin embargo, resulta incomprensible que el técnico enviado por ustedes diagnosticara que ambas placas estaban dañadas sin haber abierto los dispositivos. En cuanto al aparato de la habitación, se comprobó que el compresor no arranca, motivo por el cual no es posible su funcionamiento y consta en el informe técnico que les remito.
Por todo ello, les solicito amablemente que reconsideren el caso, ya que, según la valoración inicial de su propio técnico, el origen de los daños es claramente atribuible al apagón sufrido.
Les ruego que autoricen con la mayor brevedad posible la reparación del aparato afectado, teniendo en cuenta las elevadas temperaturas que seguimos soportando en la zona. Esta situación está afectando directamente al bienestar y la salud de quienes habitamos en la vivienda, lo que podría haberse evitado si el siniestro hubiera sido gestionado con la diligencia adecuada desde un primer momento.
Confío plenamente en que sabrán resolver este caso con el compromiso y responsabilidad que caracterizan a Mutua Madrileña, evitando así tener que explorar otras vías para obtener una solución justa.
Atentamente,
[JOAQUIN MARIN PLAZA]
[Nº POLIZA - 0002070116]