El 13 de septiembre de 2023, inicié un traspaso de cartera de inversiones que, a día de hoy, sigue pendiente sin motivo aparente. A pesar de disponer de fondos más que suficientes para cubrir las comisiones relacionadas, el proceso ha sido bloqueado, lo que implica una retención injustificada de activos y una acumulación de comisiones por parte de la entidad bancaria en cuestión.Transcurridos casi dos meses, la falta de comunicación y la ausencia de una resolución eficaz han mermado mi confianza y me han colocado en una situación de vulnerabilidad financiera. Este tipo de prácticas, que carecen de transparencia, son preocupantes y deberían alertar a cualquier cliente actual o potencial sobre los posibles riesgos al operar con dicha institución.Ante esta demora inexplicable, considero necesario exigir no solo el traspaso inmediato de la cartera sino también una compensación por los perjuicios sufridos. Este incidente resalta la importancia de la responsabilidad y la ética bancaria, así como de un servicio al cliente que debería ser prioritario para cualquier entidad financiera.La situación expuesta aquí debería servir como un llamado a la acción para garantizar que se respeten los derechos de los consumidores y se mantengan los estándares de fiabilidad y respeto que se esperan de cualquier banco.