Realizamos una compra de dos toldos nori en Valladolid, nos cobraron el traslado y nosotros les instalamos. Uno lo instalamos sin ningún tipo de problema pero el otro está defectuoso en la parte donde debe enganchar la argolla que permite estirar y recoger el toldo. Llamamos por teléfono a los números de leroy merlín y jamás lo cogen solo conseguimos contactar con ellos si nos desplazamos hasta la tienda, cosa que hemos hecho en 4 ocasiones (a 72 km de nuestro domicilio) y allí lo único que no dan son largas. Se pasan el problema de unos a otros y no nos ofrecen una solución efectiva. Nos hicieron enviar un email con fotografías del problema y nos facilitaron una argolla EXACTAMENTE IGUAL a la que aparecía en nuestra fotografía (y eso que ya habíamos dicho que ese no era el problema y que el problema es de la parte del toldo donde ha de enganchar la argolla). En definitiva, tenemos un toldo de 400 euros roto y sin respuesta por parte de la tienda a nuestro problema. Es una vergüenza.