El pasado 25 de septiembre de 2025, el repartidor de Power Planet dejó mi pedido en el portal del edificio SIN AVISAR, una puerta abierta al público, sin llamar al telefonillo, sin contactar conmigo por teléfono y sin solicitar ningún dato personal (como DNI) para confirmar la entrega. Se trata de un pedido valorado en casi 1000 €.
Al comprobar que no había recibido el paquete, contacté inmediatamente con Power Planet. Su respuesta fue nula en cuanto a soluciones reales: simplemente tomaron nota, pero no ofrecieron ninguna compensación ni alternativa para recuperar el pedido.
Al día siguiente, el propio repartidor acudió a mi domicilio para pedirme disculpas, confirmando lo siguiente:
• No llamó a mi vivienda.
• No llamó a mi número de teléfono.
• No tenía mi DNI ni verificó la identidad de la persona a la que “entregó” el paquete.
En resumen, entregó el paquete a otro vecino sin ningún tipo de comprobación.
Volví a contactar con Power Planet, y nuevamente no recibí ninguna solución. A día de hoy, lo único que he obtenido por parte de la empresa son disculpas, pero ni el reembolso ni el producto han sido entregados.
Considero que Power Planet ha incumplido su deber de garantizar la correcta entrega de la mercancía, y su actuación posterior ha sido claramente negligente. Por ello, solicito la intervención de la OCU para que se responsabilicen de la pérdida y me reembolsen el importe íntegro del pedido.