El pasado 24 de marzo, realicé la compra de una televisión de 55 pulgadas a través de la tienda online de [MEDIMARKT]. En la app de la empresa se indicaba que el producto llegaría al día siguiente. Ante la duda, contacté telefónicamente con atención al cliente y me informaron que la entrega sería el 28 de marzo.
Ese día permanecí en casa esperando el producto, pero no hubo entrega ni información de seguimiento de transporte. Tras varios días sin noticias, volví a contactar (pasado el fin de semana) y me comunicaron que el producto no estaba en stock. A pesar de insistir para saber cuándo estaría disponible, no supieron darme una fecha concreta, ya que, según me dijeron, el departamento de atención al cliente no tiene comunicación directa con otros departamentos.
Ante esta falta de claridad y profesionalidad, decidí cancelar el pedido. Me indicaron que en un plazo de 14 días naturales recibiría el reembolso del importe pagado.
Sin embargo, llegada la fecha (hoy 14 de abril), el reembolso no se ha efectuado. En su lugar, he recibido un correo electrónico notificando que el pedido ha sido enviado, a pesar de que ya había sido cancelado hace semanas. Ahora, según me han explicado, debo esperar a que el pedido llegue a mi domicilio, que se rechace o se devuelva, y que el producto vuelva a su almacén para que entonces se valore si procede el reembolso.
Me parece un proceso totalmente inaceptable y una mala praxis por parte de la empresa. Además, las tiendas físicas se desvinculan completamente de la tienda online, lo que imposibilita resolver cualquier incidencia por esa vía, a diferencia de otras marcas como Zara que sí permiten devoluciones físicas de pedidos online.
Solicito la devolución inmediata del importe pagado, así como una explicación por la falta de stock, el envío indebido del producto cancelado y el incumplimiento de los plazos establecidos legalmente para devoluciones.
Agradezco su intervención para resolver esta situación lo antes posible.