Esta reclamación formal se presenta debido a un incumplimiento claro del derecho de garantía, así como a una gestión deficiente del servicio postventa, que ha derivado en molestias personales y materiales significativas con la empresa Venta única (Vente-unique) por la compra de un sofá adquirido en venta online en verano de 2023.
El 11 de abril de 2024 me puse en contacto con ellos para informar de un defecto de fabricación, ya que el sofá adquirido presentaba un hundimiento prematuro, impidiendo su uso normal. Desde ese momento, el proceso ha estado marcado por la falta de coordinación y la confusión entre diferentes agentes del equipo, quienes me solicitaron repetidamente los mismos documentos (factura, fotos, código de pieza, etc.) prolongando innecesariamente el proceso durante dos meses.
A pesar de que se me informó finalmente de que se sustituiría la parte defectuosa, la entrega (prevista para el 28 de junio entre las 13:30 y 15:30) no se realizó correctamente debido a un error en la dirección y por venir al domicilio antes de la hora prevista. Tras insistencias por mi parte, se reprogramó para el 1 de julio, momento en el cual recibí un sofá que no era el mío.
Desde entonces, el problema no ha sido solucionado y he tenido que soportar una situación de abuso de poder con un circuito de comunicación nefasto con un sofá inutilizable durante varias semanas, coincidiendo con la recepción de visitas en mi domicilio. Como consecuencia directa de la negligencia en la gestión de esta reclamación:
He tenido que alojar a familiares y amigos en un sofá cama defectuoso de casi 500 euros.
El sofá no está en condiciones de ser utilizado, lo cual afecta directamente a unos planes organizados con antelación para el mes de julio y agosto, realizados con previsión suficiente precisamente para evitar este tipo de inconvenientes. Esta situación, provocada por la falta de resolución eficaz por parte de la empresa, está condicionando y comprometiendo la planificación de nuestro verano, y lo más grave es que, tras haber gestionado todo con suficiente previsión y paciencia, ahora se nos exige nuevamente adaptar nuestros planes personales y vacacionales durante agosto, comprometiendo aún más nuestro tiempo y disponibilidad por un problema que no hemos causado.
Se me ha ofrecido un bono de 100 €, la cual considero insuficiente dadas las molestias, el tiempo invertido, los perjuicios ocasionados y el uso no disponible del bien adquirido.
El riesgo de ser penalizada con tasas de almacenaje como indican los últimos emails que he recibido debido a mi ausencia en vacaciones, no puede recaer sobre mí, ya que es consecuencia de los errores acumulados en el servicio.
Considero que esta gestión ha sido no solo deficiente, sino claramente maltratadora con el cliente, al alargar el proceso con descoordinación interna, múltiples interlocutores, peticiones repetidas y promesas incumplidas, sin asumir en ningún momento la responsabilidad de facilitar una solución ágil y digna. Por todo lo anterior, solicito:
La sustitución inmediata del producto defectuoso sin costes añadidos, incluyendo desmontaje y montaje en las fechas previstas con la empresa.
Una compensación económica adecuada que repare el incumplimiento del servicio, el daño moral y los perjuicios personales ocasionados.
Que se me garantice por escrito que no se me cobrará ninguna penalización por almacenaje ni se me exigirá disponibilidad en fechas en que ya he comunicado mi ausencia.
Atentamente,
Fernanda Castro Gallardo