Hace ya tres meses lleve mi Skoda Yeti (1.2 TSI) al concesionario oficial de Skoda en Almería (Almerigama) con una avería aparentemente seria. Efectivamente, como resultado de un problema en la cadena de distribución, las válvulas sufrieron daños importantes lo que hacía aconsejable el cambio de motor.Con fecha 24 de enero 2017 envíe un escrito al servicio de atención al cliente de Skoda solicitando, como buen cliente que soy de la marca, algún tipo de acción comercial que contribuyera a reducir el coste de reparación de una avería que no debería haberse producido dados el uso, el mantenimiento y la antigüedad del vehículo.Desde entonces• No he recibido contestación concreta alguna a mi requerimiento, ni por escrito ni de palabra.• Me han estado mareando con justificaciones del tipo “estamos esperando informes desde el concesionario” o “estamos intentando hablar con el jefe de taller” cuando al mismo tiempo en el concesionario me informan que les han enviado toda la documentación necesaria y han hablado con ustedes siempre que han sido consultados.• No he recibido ni se me ha facilitado ningún presupuesto detallado de la reparación.• El vehículo está reparado desde hace un mes. Desde entonces permanece en el taller sin que se haya progresado nada en la resolución de mi demanda.• Según me informan, el problema causante de la avería es atribuible a problemas que un tensor de la cadena presenta en ese tipo de motorizaciones. Volkswagen si realiza revisiones de la pieza pero Skoda no.• Como podrán imaginar las consecuencias en el día a día de tener un coche inmovilizado son como poco incómodas y costosas, afectando seriamente a mi vida tanto profesional como familiar. Ustedes me están perjudicando gravemente.• La sensación es francamente decepcionante, tanto por el ninguneo al que me he visto sometido como a la falta de profesionalidad del servicio de atención al cliente. Hasta ahora tenía buena opinión de la marca, hasta el punto de tener dos Skoda y haber recomendado la marca a amigos y familiares: Después de esto mi intención firme es dejar de ser cliente de la marca.