El viernes 2 de mayo de 2025 acudí con mi novia a la tienda de iServices ubicada en San Cristóbal de La Laguna, Tenerife. El motivo fue la sustitución de una
pantalla rota, aunque el táctil del dispositivo funcionaba correctamente, tal como consta en la Orden de Trabajo OT 25589. En el cartel del establecimiento se indicaba
que el cambio tardaría 30 minutos, pero finalmente se demoró 2 horas y media. Tras un primer cambio de pantalla, al recibir el iPhone noté que la pantalla nueva tenía
una rotura. El técnico no la detectó; fui yo quien lo indicó. Se procedió entonces a un segundo cambio de pantalla, sin prioridad alguna al dispositivo. Sin embargo, a
los cinco minutos de salir del local, el táctil dejó de funcionar. Al volver, el técnico me indicó que era “normal”, que se debía a una medida de seguridad de Apple, y
que al reiniciar el dispositivo el problema se solucionaría. El reinicio sólo resolvió el fallo de manera temporal. A lo largo de los días siguientes, el táctil siguió fallando
repetidamente.
El lunes 5 de mayo de 2025 acudí a la tienda de iServices en Las Arenas, siendo atendido por un técnico llamado Antonio, según consta en la Orden de Trabajo OT
25744. Tras explicar lo sucedido, realizó otro cambio de pantalla y dijo que el error se debía a que sus compañeros de la tienda de La Laguna no habían apretado
bien los conectores, justificándolos por ser una tienda nueva con poca experiencia. Aproximadamente media hora después, el táctil volvió a fallar. Al regresar al
establecimiento me indicaron que ya era tarde y que volviera al día siguiente, ya que tenían más dispositivos en cola.
El martes 6 de mayo de 2025 acudí nuevamente a iServices Las Arenas y se generó la Orden de Trabajo OT 25813. Se realizó un nuevo cambio de pantalla. Esa
misma noche el táctil dejó de funcionar nuevamente, presentando los mismos fallos anteriores. Nuevamente tuve que reiniciar el dispositivo para que funcionase de
manera intermitente.
El jueves 8 de mayo regresé a la tienda para hablar con el encargado. Me indicó que otro cambio de pantalla no tenía sentido y que solicitaría la pantalla original a la
tienda de San Cristóbal de La Laguna. También me pidió que enviara un correo detallando la situación, y los vídeos que demostraban el fallo táctil, por WhatsApp. Me
aseguró una respuesta en 24–48 horas.
Al no recibir respuesta, el lunes 12 de mayo realicé dos llamadas a la tienda solicitando información sin obtener respuesta. El martes 13 de mayo me comunicaron que
acudiera a la tienda porque ya tenían la pantalla original y procederían al cambio. Se generó entonces la Orden de Trabajo OT 26134. Tras la nueva instalación, el táctil
volvió a fallar de inmediato. Pedí hablar con el jefe de tienda, pero no se encontraba.
El viernes 16 de mayo me llamaron para que acudiera a probar la pantalla original y estudiar posibles soluciones. El 21 de mayo llegué al establecimiento a las 17:30 h
y hablé con el encargado. Colocaron la pantalla original y, tras unos minutos, volvió a fallar. Las únicas alternativas que me ofrecieron fueron: el reembolso del dinero
dejando la pantalla original (dejando el móvil inutilizable) o entregarme un iPhone SE 2020 reacondicionado, pero sin devolver el importe pagado en Tenerife y
teniendo que dejar mi dispositivo actual en la tienda.
A todo ello se suma la generación de órdenes de trabajo con informes técnicos falsos, incluyendo la afirmación: “El terminal se recoge apagado, por lo que no podemos
verificar el correcto funcionamiento del dispositivo ni el resto de sus componentes.” Esta afirmación es completamente falsa. En todas las ocasiones entregué el
dispositivo encendido, explicando específicamente que el fallo estaba en el táctil tras la sustitución de la pantalla por parte de su servicio técnico.