Hace años me realizaron un tratamiento en una muela que resultó ser defectuoso. Durante el período de garantía, la muela no soportó el trabajo realizado y se cayó en varias ocasiones. Presenté reclamaciones en varias ocasiones para que se solucionara, lo cual debe estar reflejado en mi historial. En su momento, me informaron que la muela sería reparada, pero que no podían intervenir debido a que estaba en tratamiento de ortodoncia, y los médicos de ese momento no podían proceder. Me sugirieron esperar a que el tratamiento de ortodoncia estuviera más avanzado, lo cual acepté.
A día de hoy, finalmente están atendiendo este problema, pero ahora se me solicita que pague el procedimiento, lo cual considero inaceptable. No se trata solo de los 600 € que me reclaman, sino de todo lo que implica este proceso: las interminables tardes que he pasado en la clínica esperando una solución, las veces que he reclamado mis derechos y las incomodidades que he experimentado al ser tratada sin empatía por algunos de los trabajadores, quienes me han hecho sentir incómoda por algo que es mi derecho.
Tampoco puedo dejar de mencionar lo doloroso y molesto que son los tratamientos dentales en sí, algo que he tenido que repetir más de tres veces debido a la misma causa. No pido que se entienda mi situación al 100%, pero sí espero empatía y el cumplimiento de lo estipulado en nuestro contrato, especialmente en lo que respecta a las garantías del trabajo realizado.
Si no me hubieran dicho desde el principio que esta muela entraría por garantía, no me hubiera arriesgado. Y tú, lector, ¿te arriesgarías a hacerte una muela por cuarta vez en una clínica después de todo lo vivido? Lo dudo...
En mi defensa, acepté someterme al tratamiento porque finalmente confío en el médico que me atiende, y creía que, cuando lo consideraran necesario, me arreglarían la muela. No me gusta estar en esta situación, especialmente porque visito la clínica al menos dos veces al mes y no disfruto sentir que los trabajadores me ven como una molestia. Mi objetivo nunca ha sido incomodar, pero considero injusto que, después de tantas reclamaciones y molestias, siga enfrentando este problema.
Espero que se revise mi caso y que se haga justicia, respetando los derechos y compromisos adquiridos desde el inicio de este proceso.