El viernes día 8 de septiembre, a las 16:20 horas, me personé en el taller para recoger mi vehículo tras la revisión (la señora a cargo de su recepción me indicó que podia hacerlo de 16:00 a 17:30). Estando el vehículo ya listo y no habiendo ningún otro cliente al que atender, esta misma señora se negó a entregármelo con la excusa de que antes tenía que hacer una gestión en el ordenador. Le pedí que lo hiciera su compañera, que estaba libre. Afirmó no ser posible. Transcurrida media hora comentó “son las cinco menos diez. Ya no puedo terminar la gestión.” La entrega de la llave y firma del documento no superaron los 10 segundos, lo que no hubiera supuesto un gran retraso en la finalmente inacabada gestión de media hora. Ya en posesión de la llave, cuando me dispuse a entrar en el coche , comprobé que no habían retirado los plásticos protectores. Tuve que pedir a la otra recepcionista que los retirase , ya que la que "me atendió" estaba ausente.
SOLICITA
Que la atención al cliente y el trato considerado debe ser la prioridad del personal.
Que tomen las medidas oportunas para garantizar que no se repitan episodios de agravio similares sin justificación alguna.