Después de contactar con AXA seguros y darme de baja en un par de ocasiones, la primera, telefónicamente, donde su agente nos comunica que está todo perfecto y la segunda, por correo ordinario sin respuesta alguna, siguen cobrándome los recibos de un coche que está dado de baja y ya no soy el propietario.
Ellos son sabedores de que, al tener el pago domiciliado en la tarjeta, no lo puedo protestar y por lo tanto, devolver el recibo y se aprovechan de la situación.
Es muy lamentable que, ante todos estos hecho, no me haya quedado más solución que, anular esa tarjeta y hacerme otra nueva.
Solicito, que se comunique oficialmente mi baja y que se me solicite la documentación necesaria para hacer un extorno de lo cobrado injustamente.
Es para AXA una muy mala promoción de su marca.
Atentamente.
Joaquín Amat Picó