Me han dejado a las 20.30 de la noche tirada con las maletas que debían recoger para enviar a mi destino vacacional. Resulta que viajo con una persona mayor y ahora tengo que llevarlas yo y no voy a poder con todo lo previsto de equipaje.
Intento hablar con alguien de la empresa y es inútil. La atención telefónica termina a las 19.00 y yo esperaba que de 15.00 a 20.00 horas iban a recoger el equipaje, pero a las 20.30 me salta que lo he cancelado en el seguimiento de la web.
Ni siquiera puedo escribir mi reclamación, tan solo me permiten enviar un correo a atencion al cliente o hablar con un robot llamado Lola.
En cuanto vuelva de vacaciones iré directamente a las oficinas centrales de Madrid.
Qué impotencia.