Sábado 1/03 sobre las 19:30hs con mucha lluvia sobre Madrid, me dispongo a ir a la chocolatería con una amiga para merendar, después de esperar en la calle un buen rato, nos asignan una mesa muy pequeña con muy poco espacio para moverse (estando pegadas a las personas de la mesa de al lado), cuando veo que hay más mesas libres y que a otras personas les asignan lugares con más espacio, pues me levanto y me siento en otra mesa donde puedo moverme sin estar molestando al de al lado.
Desde ese momento, una de las dependientas nos dijo, de mala manera, que ese no era el lugar asignado. Le contesté que el lugar asignado no entrábamos 2 personas y era muy incómodo por lo que decidimos cambiarnos a un lugar más confortable (cuando al resto de personas le dejaban sentarse en mesas con más espacio).
Después de cambiarnos de mesa, otro de los camareros le decía a los clientes nuevos que no le podían dar mesa porque nosotras (clientas ya sentadas) les habíamos quitado el lugar (cuando había mesas libres).
Esperamos a que nos atiendan para realizar el pedido, y nadie venía a atendernos. Llamé varias veces a las camareras y no se detenían a tomarnos el pedido, hasta que me levanté y pedí en la barra. Las personas de la barra me atendieron y cuando se disponían a ejecutar el pedido, he visto con mis ojos que otro camarero o personal del local, le daba la orden de "no atendernos", como si fuéramos personas delincuentes, drogadictas, mafiosas.. Somos 2 mujeres de más de 50 años que nos habíamos encontrado en una tarde muy lluviosa a merendar, y me encuentro con esta falta total de respecto a quien se supone que es un cliente y con dinero para pagar lo consumido.
Estuvimos con mi amiga sentadas casi 40 minutos, ocupando una mesa para consumir, y nadie vino a atendernos, por lo que exigí una hoja de reclamaciones porque el mal trato de estos personajes me pareció indignante y más aún que estén de cara al cliente.. Todos los camareros eran inmigrantes, incluso los que dieron orden de no atender, tenían aspecto de latinos (si bien yo no tengo nada en contra de los latinos, ni de razas, ni etnias... ya que yo soy latina también, aunque mi aspecto es nordico).
Me dieron 1 sola hoja de reclamaciones,y me dijeron que la rellene y luego ellos la imprimen y sellan para presentar ante los organismos correspondientes. Adjunto la hoja, con el sello de la chocolatería.
No sé qué consecuencias tendrá mi reclamación, pero nos hicieron pasar un rato tan tan desagradable que en mi vida tuve un trato tan miserable (y tengo 54 años vividos y con mundo recorrido, y mi amiga con 60 años), en todos mis años de vida jamás tuve que escribir a la central de un comercio para redactar una queja por malos tratos, como lo estoy haciendo hoy.