Estimados/as señores/as:? Me pongo en contacto con ustedes con el fin de realizar una reclamación debido a que una avería en mi vehículo el 1 de mayo de 2023, que me llevó a depositarlo en el taller BORANXO S.L al día siguiente, el 2 de mayo del mismo año. Inicialmente, se me proporcionó un presupuesto de 1.700 euros para la rectificación de la culata. Sin embargo, la reparación experimentó retrasos significativos, lo que resultó en la necesidad de un vehículo de sustitución, el cual me fue otorgado el 30 de mayo. La dilación en la reparación continuó hasta el punto de que el coche de sustitución, que había estado utilizando, sufrió una avería el 5 de septiembre y me fue retirado sin ofrecerme uno alternativo.Posteriormente, a principios de octubre, se me informó que la reparación del motor no era posible y se requería la instalación de un motor de segunda mano, lo cual ascendía a un costo aproximado de 3.800 euros. Dada la esencialidad del vehículo para mi trabajo, accedí a esta solución. Después de constantes seguimientos al mecánico, quien mostró una notable falta de comunicación sobre el progreso de la reparación a menos que fuera contactado directamente por mí, y tras haber estado 90 días sin vehículo de sustitución, recurriendo a préstamos de familiares y amigos para poder trabajar, la reparación concluyó. Sin embargo, esta reparación incluyó un cargo de 531,38 euros por materiales destinados al motor originalmente defectuoso que finalmente fue desechado.Al recibir mi vehículo, noté el parabrisas roto, situación ante la cual el mecánico aceptó responsabilidad y se comprometió a su reparación. No obstante, ante la proximidad de la fecha límite establecida para la inspección técnica vehicular (ITV) el taller continuaba sin comunicarse y debido a la previa experiencia de dilaciones, opté por realizar la reparación por mi cuenta para evitar más inconvenientes. Pocos días después, empecé a percibir un ruido anormal en el motor, olor a aceite quemado y humo por el escape. Inicialmente atribuí estos problemas al proceso de adaptación del nuevo motor, pero persistieron, llevándome a contactar nuevamente al mecánico tras una rápida disminución del nivel de aceite. Después de entregar el coche al taller, el mecánico sugirió que el ruido podría deberse a un problema con un taqué, asegurándome que podía seguir utilizándolo sin riesgos hasta su reparación. Procedió a rellenar el aceite y me instruyó a retornar el vehículo para revisión una vez que el nivel de aceite descendiera nuevamente al mínimo, con el fin de evaluar el consumo de aceite. Transcurrido otro mes, el nivel de aceite disminuyó, y al comunicarme con el taller para llevar el coche, el mecánico indicó que no era posible atenderme en ese momento, pero aseguró que mi notificación era suficiente y prometió contactarme tras consultar con el proveedor del motor sobre la garantía. Sin embargo, después de dos semanas sin noticias, lo contacté nuevamente, y aunque afirmó que debía haberse reunido con dicho proveedor la semana anterior, nunca se concretó y continuó sin comunicarse.La experiencia con el taller ha sido sumamente negativa, destacando 90 días sin un vehículo de sustitución a pesar de mi necesidad del coche para trabajar, cambios inesperados en el presupuesto, y cobros por trabajos en un motor que, a la postre, fue rechazado. Además, recibí el coche con el parabrisas roto, el aire acondicionado inoperante, pequeños arañazos, y la ausencia de algunos embellecedores. A esto se suma que el coche no funciona correctamente y la demora injustificada en la reparación garantizada. He intentado solucionar los inconvenientes de manera directa y paciente con el taller, mostrando buena fe. Sin embargo, la falta de reciprocidad es evidente, y parece que el taller intenta eludir sus responsabilidades por los errores cometidos a toda costa. Ante la conducta del taller, opté por registrar todas las conversaciones, tanto presenciales como telefónicas, para respaldar una eventual reclamación. Asimismo, conservo todas las comunicaciones escritas y la documentación proporcionada por el taller, las cuales corroboran las afirmaciones presentes en este texto. Por motivos legales y de protección de datos, no puedo divulgar estos materiales aquí, pero estoy dispuesto a presentarlos ante un juez y a realizar una declaración jurada si fuera necesario. Por lo tanto, exhorto al taller mecánico a asumir sus responsabilidades de manera inmediata, con el fin de prevenir una escalada en este conflicto. Por lo tanto, mis reclamaciones son las siguientes:- Que la la reparación del motor se realice de manera inmediata en otro taller de mi elección, dado que he perdido toda confianza en su capacidad de servicio. Y que taller BORANXO S.L se haga cargo de los costos derivados de dicha reparación.- Que se me proporcione un vehículo de sustitución durante el tiempo que dure la reparación.- Una compensación por los 90 días sin vehículo de sustitución, lo que ha tenido un impacto negativo significativo en mi capacidad para trabajar, la devolución de los 531,38 euros correspondientes al motor descartado, y una indemnización por los gastos incurridos en la reparación del parabrisas. Sin otro particular, atentamente.Recuerda no incluir ningún dato personal o sensible, ni tuyo ni de un tercero, como puede ser nombre, apellidos, DNI, número de teléfono, dirección postal, cuenta y tarjeta bancaria, email…