El pasado 23 de enero decidí comprar un vehículo de la marca Dacia Sandero en el concesionario Renault de la calle Oca, 7, en Madrid. Entre las diferentes opciones ofertadas para el equipamiento del vehículo se encontraba el pack navegación que incluía la pantalla multimedia con el navegador gps integrado. Una vez revisadas todas las opciones de equipamiento decidí comprar el vehículo con el navegador incluido y así se incluyó en la hoja de pedido de vehículo nuevo (adjunto documento). En la compraventa del coche se incluía como medio de pago la entrega de un vehículo antiguo valorado en 3800 € aprox por parte del concesionario. Después de diferentes retrasos en la entrega (ya que el compromiso de entrega era para la semana nueve del presente año, la última semana de febrero) finalmente se hizo entrega del vehículo el día 7 de abril de 2021. El motivo de la presente reclamación viene motivada porque en el momento de recoger el vehículo una vez que ya estaba matriculado se observó que no disponía del navegador integrado en pantalla. Una vez detectada esta situación se hizo la pertinente reclamación de forma verbal ante el comercial que nos había atendido. El comercial reconoció el error y nos pidió que nos pusiéramos en contacto con él al día siguiente para que le diera tiempo a gestionar este fallo en el equipamiento del coche. Tras no tener noticias por parte del comercial se decide acudir presencialmente al concesionario el día 12 de abril (5 días después de recoger el vehículo), y hablar directamente con él. La versión del comercial es que es técnicamente imposible poder instalar el navegador en la pantalla actual del coche. Como compensación se ofreció la devolución del importe cobrado por este concepto y la colocación en el vehículo de un cargador inalámbrico para el teléfono móvil y un cambio de la antena por una más pequeña de tipo tiburón. Tal y como se comentó al comercial la compensación no solucionaba en absoluto la situación en la que me encontraba al no disponer de navegador. Ante esta nueva negativa el comercial nos ofreció la devolución del coche y la solicitud de un coche nuevo de las mismas características y con navegador incluido si bien no podía garantizar su entrega antes de noviembre de 2021. Puesto que la utilización del vehículo es fundamentalmente por motivos laborales el ofrecimiento realizado por el comercial y las trabas para disponer de vehículo hasta noviembre de 2021 resultaba del todo imposible teniendo en cuenta que además el coche anterior del que disponía el reclamante se había entregado como parte del pago del vehículo nuevo y por lo tanto no podría disponer de coche hasta dicha fecha con el consiguiente trastorno en el desplazamiento a su trabajo. Al rechazar también esta opción el comercial nos pidió una semana de plazo para intentar darnos la solución definitiva que sería la inclusión del navegador en el vehículo adquirido. Transcurrida dicha semana, ni el concesionario ni el comercial se pusieron en contacto por lo que el día 21 de abril decidí enviarle varios mensajes a través de WhatsApp. En la conversación mantenida por dicho medio el comercial indica que seguía siendo técnicamente imposible colocar el navegador en el coche y que no obstante había puesto una reclamación directamente a Renault España para que intentarán integrar el navegador en la pantalla actual. Ante la falta de noticias por parte del comercial desde esa fecha, el 21 de mayo se interpone reclamación ante el servicio de atención al cliente de Dacia (Renault España), mediante un escrito en su página web. Tras diversas comprobaciones y llamadas con este servicio, finalmente comunican mediante llamada telefónica, el lunes 31 de mayo, la resolución del expediente denegando la solicitud del reclamante alegando a motivos técnicos que imposibilitan la colocación de una pantalla táctil multimedia que incluya el navegador, tal y como constaba en el contrato de compra venta del coche. En dicha conversación se remite al reclamante al concesionario donde se ha adquirido el vehículo para cualquier futura gestión. El martes 1 de junio se recibe email donde se constata el cierre y resolución del expediente. En todo este procedimiento, ni por parte del concesionario, ni por parte de atención al cliente de Dacia (Renault España) se adjunta o presenta DOCUMENTACIÓN PERICIAL que acredite la imposibilidad técnica para subsanar el error cometido. Únicamente se limitan a decir literalmente “que técnicamente no es posible”, sin aportar documentos o razonamientos para dicha afirmación. Ante esta situación, y sin una solución al incumplimiento del contrato por parte del vendedor, me gustaría iniciar el procedimiento que estime oportuno la Asesoría Jurídica de la OCU Quedo a la espera de sus noticias lo más pronto posible. Gracias por su tiempo.