La empresa de transporte afirma haber realizado la entrega, basando su argumento en que figura mi nombre completo y un número de DNI como prueba. Sin embargo, deseo dejar constancia de los siguientes puntos que demuestran que dicha entrega no se efectuó correctamente:
El nombre completo no es prueba válida de entrega: El nombre completo no constituye una prueba suficiente, ya que esta información ya estaba en poder de la empresa desde el momento de la contratación del servicio. No se ha presentado ningún documento firmado por mí ni prueba verificable de mi identidad en el momento de la supuesta entrega.
El DNI aportado es incorrecto y no es un DNI válido: El número de documento que se presenta como prueba no solo no coincide con mi número real de DNI, sino que además no se corresponde con un formato válido de documento nacional de identidad en España, lo que indica claramente que la entrega fue recibida por otra persona o registrada de forma errónea. Esto refuerza aún más que no se ha verificado adecuadamente la identidad del receptor.
Horario incompatible con la dirección de entrega: He aportado los horarios oficiales de la empresa ubicada en la dirección de entrega, y se demuestra que en el horario en el que se supone que se realizó la entrega, el local se encontraba cerrado. Por tanto, no era posible recibir el paquete en ese momento.
Situación personal (baja médica): Durante las fechas en cuestión, me encontraba de baja médica, circunstancia que imposibilita que yo mismo haya firmado o recibido el paquete, lo cual refuerza la falta de veracidad de la supuesta entrega.
La carga de la prueba recae en la empresa de mensajería: Conforme a la normativa de consumo y transporte de mercancías, es obligación de la empresa de mensajería demostrar fehacientemente que la entrega fue realizada al destinatario correcto. En este caso, no han podido acreditar tal extremo, y los datos aportados no son concluyentes ni fiables.
En virtud de las molestias y el daño causado solicito indemnización por el paquete extraviado, lo correspondiente al daño moral hacia mi persona y el incorrecto tratamiento de mis datos personales por parte de la empresa de paquetería haciendo hincapié en la falsificación documental con mis datos.