Estimados/as señores/as:
Me pongo en contacto con ustedes porque adquirí una entrada para el festival Brava Madrid 2025, con un precio de 34,99 €, cuya celebración estaba prevista para los días 19 y 20 de septiembre de 2025.
En primer lugar, se han producido varias cancelaciones de artistas debido al boicot a KKR, entre ellos Pixie Lott, Villano Antillano, Aquaria, Oro Jondo y Lalachus. Algunos de estos artistas influyeron directamente en mi decisión de adquirir las entradas. No obstante, estas cancelaciones no han sido comunicadas de forma oficial a los compradores; la única acción por parte de la organización fue la publicación de un nuevo cartel sin ningún aviso ni explicación. Como consecuencia, el cartel inicialmente anunciado no guarda relación con el actual, lo que supone una modificación sustancial de la oferta presentada en el momento de la compra.
Asimismo, el concierto de La Casa Azul, el cual era el principal motivo de compra de la entrada se canceló aparentemente debido a un problema técnico derivado de las condiciones meteorológicas; el concierto de Miss Cafeína fue interrumpido con el visible disgusto de los propios artistas; el concierto de Chanel empezó con casi una hora de retraso, y el concierto de Anastasia se vio afectado por dicho retraso y duró menos de lo prometido.
Por todo lo expuesto, considero que se ha producido una modificación sustancial e inaceptable de las condiciones bajo las cuales se efectuó la compra.
Por otro lado, la plataforma “Por la Paz en Palestina” en Torrejón de Ardoz denunció públicamente, el 13 de junio de 2025, la vinculación de Brava Madrid con el fondo KKR, a través de su pertenencia a Superstruct Entertainment, cuya actividad inversora está relacionada con territorios palestinos ocupados. Esta conexión ha sido señalada como apoyo a un genocidio en curso. En este sentido, otros festivales financiados por KKR, como el Sónar, han abierto vías de devolución de entradas por motivos éticos, lo que refuerza la legitimidad de mi solicitud.
En relación con esto último, acudí al festival con una bandera de Palestina para mostrar mi apoyo a toda una comunidad que está sufriendo un genocidio. El sábado 20, segundo día de festival, un par de policías de paisano me invitaron a salir del recinto alegando que aplicaban el derecho de admisión y que no podía estar allí con la bandera. Me pidieron mi identificación y me dieron la posibilidad de guardar la bandera en una taquilla, pero no de guardármela yo mismo, tras lo cual decidí abandonar el festival.
Según la Ley 17/1997, de 4 de julio, de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas de la Comunidad de Madrid, «el derecho de admisión deberá tener por finalidad impedir el acceso de personas que se comporten de manera violenta, que puedan producir molestias al público o usuarios o puedan alterar el normal desarrollo del espectáculo o actividad. Las condiciones para el ejercicio del derecho de admisión deberán constar en lugar visible a la entrada de los locales, establecimientos y recintos». Ninguna de las condiciones para la aplicación de tal derecho se cumplió, ya que no se explicitaba en ningún lugar que no se pudiera entrar con banderas de Palestina (de hecho, ambos días entré con la bandera y nadie me informó de nada), y el hecho de que yo me paseara con la bandera a modo de capa no alteraba de ningún modo el normal desarrollo del espectáculo.
Por todo lo anterior,
SOLICITO
La devolución íntegra del importe abonado, incluidos los gastos de gestión, y la confirmación por escrito del procedimiento que se seguirá para su reintegro. Normativa aplicable: Ley 17/1997, de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas de la Comunidad de Madrid (derecho a devolución en caso de modificación sustancial). Ley de Consumidores y Usuarios (Real Decreto Legislativo 1/2007 modificado por la Ley 3/2014): esta ley establece las condiciones generales de protección de los consumidores y es la base de la normativa que rige estos casos. Real Decreto 2816/1982 (derecho del público ante variaciones relevantes del espectáculo).
Quedo a la espera de su respuesta y de la decisión que adopten al respecto
Sin otro particular, atentamente.