Me pongo en contacto con ustedes porque en la madrugada del 29 al 30 de noviembre, al abandonar la discoteca Wolf, fui tratado de manera violenta e injustificada por parte de varios porteros del establecimiento.
Cuando me dirigía a la salida, uno de los porteros me agarró bruscamente del brazo sin motivo. Al apartarme por el dolor y explicar que simplemente me estaba yendo a casa, otros cuatro porteros se abalanzaron sobre mí, sujetándome e insultándome, y me arrastraron hasta otra zona de la salida, empujándome hacia una catenaria roja. En ningún momento mostré resistencia ni conducta que justificara ese trato.
Considero que esta actuación es totalmente inaceptable, abusiva y contraria a mis derechos como consumidor.
SOLICITO:
– Que se investiguen los hechos descritos y se requiera al establecimiento una justificación.
– Que se adopten las medidas necesarias frente al comportamiento del personal de seguridad.
– La devolución íntegra del importe de la entrada, ya que el servicio no se prestó en condiciones adecuadas de seguridad y respeto.
Sin otro particular, atentamente.