Estimados/as señores/as:
Me pongo en contacto con ustedes porque he estado en la San Diego Comic Con de Málaga los días viernes y sábado 26 y 27 de septiembre de 2025.
Lo primero que quiero denunciar es que por una compra de entrada a través de internet en una plataforma que dejaba mucho que desear me cobraron por cada entrada de cada día y por cada persona 5 euros de gastos de gestión.
Los eventos de la convención se publicaron a mediados de septiembre. Algunos de ellos fueron con reserva a través de su pagina web la cual estuvo dando fallos haciendo imposible tramitar la misma hasta que se acabaron las plazas.
El viernes 26 estaba indicado en la web que las puertas abrían a las 10 de la mañana. A las 9 acudimos al recinto y tuvimos que hacer cola durante más de 3 horas hasta que pudimos pasar el primer control. Posteriormente volvimos a hacer cola otra hora para poder entrar en el edificio principal. Y una vez dentro del edificio tuvimos que hacer una nueva cola (unos 30 mins) para poder entrar en la zona de puestos comerciales (principal atracción del evento).
Ese día estaba prohibido introducir bebidas y comida en el recinto. Y en el primer control te hacían tirarlas. Dentro del recinto ferial había varios puestos de palomitas y chuches con precios abusivos (3,5 euros por una ración pequeña de palomitas y 2,5 euros por una botella pequeña de agua). A lo largo del día y viendo que los puestos de llenaban de colas se crearon "puestos ambulantes" de comida en las que los precios de la ración pequeña de palomitas ascendía a 5 euros.
Las enormes colas en la zona de restauración hicieron imposible que me planteará la opción de comer allí obligándome a salir del recinto ferial para buscar un sitio para comer (lo más cercano se encontraba a 15 minutos caminando y atestado de gente de la convención).
El sábado 27 las colas se repitieron pero con mayor afluencia de gente. Incluso vivimos momentos de miedo al formarse masas de gente que enfadada trataba de empujar para entrar en el recinto. Este segundo día dejaron introducir botellas de agua en el control probablemente como respuesta a la necesidad de traslado en ambulancia de varias personas a causa de lipotimias.
La cantidad de gente, las enormes esperas y la agobiante sensación de ser sardinas en lata me obligó a renunciar a acudir a varios eventos a los que me hubiera gustado acudir.
SOLICITO una indemnización o que se penalice a algún modo esta venta de entradas sin control que claramente superaba el aforo permitido por el interior del edificio donde se celebraba. Está organización pésima no solo ha hecho que no pueda disfrutar de la experiencia por la que había pagado sino que incluso ha hecho que tema por mi seguridad.
Sin otro particular, atentamente.