El 26 de Julio compre un gel de uñas con acción fungicida. El 30 de Agosto se recibe comunicación de Correos indicando que el envío ha sido declarado ante la Aduana como BAJO VALOR, y que para que pueda ser entregado "por no contener mercancía de valor igual o superior a 150 €", debe presentar documentación justificativa y "el envío le será entregado sin coste alguno". Se justifica el precio del producto (13,17 €), pero después Correos dice que "la Agencia Tributaria ha indicado que el envío debe pasar inspección de Farmacia. Que se debe pagar a Correos 26,97 € y a Farmacia a 18.00 €. Se solicita hasta en tres ocasiones la resolución de la Agencia Tributaria para impugnarla por no estar de acuerdo con el trámite, por tratarse de un producto cosmético (no medicamento), de escaso valor, y que ya ha pasado este trámite en numerosas ocasiones como se advierte de los centenares de comentarios de clientes de España y la Unión Europea que ya lo han recibido. No se entiende que cada vez que entra el mismo producto deba pasar el mismo trámite. Pero Correos no facilita la "supuesta" resolución de la Agencia Tributaria, insistiendo en que debo abonar las cantidades indicadas. Se reitera que no se van a triplicar los costes de un producto de escaso valor y se insiste en la solicitud de la resolución de la Agencia Tributaria sin éxito. Hay que decir que una parte del producto está formada por el "gel de uñas", y otra por un "dispositivo laser" de secado. Es de entender que el dispositivo laser cumple todos los requisitos para continuar el trámite de aduana, sin embargo sigue la misma suerte aplicada al cosmético. Además no se entiende porque el envío sigue retenido en la Aduana, pues si consideran (erróneamente), que no cumple los requisitos, debe ser devuelto a origen para recuperar el precio satisfecho, lo que no es de entender es que se lo quede la Aduana.
Esta reclamación no se realiza por el perjuicio económico que supone, sino por el abuso e indefensión que Correos somete a sus administrados, imponiéndoles reglas sin motivación alguna, pretendiendo que un producto totalmente inócuo, por el que se estaba dispuesto a pagar unicamente 13,37 €, se pretenda el pago de una suma de casi 60 € (58,38 €). Los ciudadanos no debiéramos caer en esta frecuente trampa y reclamar cada vez.