La Justicia española llega tarde y sale cara

Las cosas de palacio van despacio y quien tenga mala suerte puede pasarse más de 3 años en tribunales por asuntos menores. Con tus impuestos pagas para que la Administración funcione, pero no les basta y te suman unas tasas judiciales inconstitucionales.
Ojalá la Justicia sea ciega. Lo malo es que también es lenta y cara.
Hace 3 años sondeamos a la Justicia española con una encuesta que dictaba sentencia: 1 de cada 3 encuestados dijo que no merecía la pena porque era cara, complicada y una pérdida de tiempo.
¿Mucho tiempo? Sí, mucho tiempo:
El panorama no ha mejorado desde entonces.
El ya ex ministro Gallardón promovió una Ley de Tasas Judiciales inconstitucional y que solo ha servido para obstaculizar el acceso del ciudadano a la Justicia:
- A día de hoy, lo normal en un proceso por responsabilidad civil es que en 1ª instancia una causa tarde entre 12 y 15 meses, a los que se suman otros 12 en 2ª instancia = más de 2 años.
- Si te toca tener mala suerte, no es raro que tu proceso se alargue más allá de los 3 años.
Todo un ejemplo de ineficacia
Pagas con tus impuestos para que la Administración funcione como tiene que funcionar, pero a esto te suman las tasas judiciales (doble imposición).
¿De cuánto dinero estamos hablando? Pongamos un ejemplo en 5 pasos:
- 1. Cándido va a juicio. Quiere reclamar porque pagó 5.000 euros por una cocina que nunca le llegaron a instalar.
- 2. En 1ª instancia a Cándido le toca pagar sí o sí 350 euros. Pasan 15 meses y la cosa va mal: toca recurrir.
- 3. En 2ª instancia Cándido tiene que pagar 850 euros.
- 4. Además, hay que pagar al abogado: Cándido encuentra una buena oferta y le cobran 1.200 euros. El procurador le cuesta otros 180 euros.
- 5. Más de 2 años después de empezar, Cándido gana el pleito. Se ha gastado en total 2.580 euros, por lo que finalmente solo recupera 2.420 euros y no los 5.000 por los que fue a juicio. No le quedan ganas de celebrarlo con champán.
Es cierto que en algunos casos existe la justicia gratuita, acuerdos extrajudiciales (con devolución del 60% de las tasas), condena en costas...
Pero lo que importa es que, pase lo que pase, tienes que anticipar esas cantidades para seguir adelante: 350 y 850 euros por una reclamación de 5.000 euros (más abogado y procurador).