Así analizamos

Así analizamos los desatascadores

11 agosto 2024
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11 agosto 2024

OCU es una organización privada y, como tal, recibe sus ingresos de socios y suscriptores. Lamentablemente, no podemos analizar todos los productos que ofrece el mercado, por eso seleccionamos aquellos que sean más representativos y los enviamos a nuestros laboratorios independientes.

Todos los productos se compran de forma anónima, igual que lo haría cualquier usuario. Nunca aceptamos productos regalados por los fabricantes, garantizando así la objetividad e independencia e nuestros estudios. 

Analizamos 15 productos

Hemos analizado 15 desatascadores químicosson líquidos que contienen sosa cáustica y, muchos de ellos, lejía. Además, hemos probado la eficacia de 2 limpiatuberías, uno con agentes biológicos y otro con carbón activo.

Los productos seleccionados se envían a laboratorios especializados e independientes. Su nombre nunca es revelado, con el objetivo de garantizar su independencia, puesto que habitualmente también son laboratorios que trabajan para la propia industria.   Las muestras que se van a analizar se codifican para evitar su identificación y garantizar más aún la objetividad del estudio.

¿Cómo se hace el análisis de desatascadores? 

Los hemos probado siguiendo la dosis recomendada por cada fabricante en cuanto a cantidad de producto y tiempo de acción. Para medir su eficacia hicimos una prueba que simula las condiciones reales dentro de una tubería. Colocamos tres gramos de cabello dentro de una redecilla en una tubería con una solución de jabón y pasta dentífrica. Vertemos la dosis recomendada y esperamos el tiempo de acción indicado en las instrucciones, después pesamos la cantidad de pelo que queda en la redecilla. Entre paréntesis indicamos el peso de cada una de las pruebas en la ponderación final para obtener la calificación global.

  • Valoramos la eficacia (60 %) de los productos por la cantidad de pelo que son capaces de deshacer, lo que simula la situación del cuarto de baño, que es el caso más frecuente. En la cocina cabe esperar que sean igualmente eficaces por la eficacia de la sosa para deshacer todo tipo de materiales orgánicos. Por otra parte, hay que tener en cuenta que el sifón del fregadero de la cocina tiene la ventaja de que es más fácilmente accesible que el de la ducha.
  • En nuestro análisis hemos valorado también la composición de cada producto por su clasificación de peligrosidad (5 %) y el impacto ambiental (10 %) debido a los ingredientes de cada desatascador.
  • La agresividad de estos productos con los distintos materiales y superficies con los que van a estar en contacto es un criterio que tenemos en cuenta en la valoración del cuidado de los materiales (15 %): la valoración en este caso corresponde a un tiempo en contacto de 24 horas y hemos comprobamos que los productos que incluyen lejía en su composición son más agresivos, pudiendo dejar marcas visibles en cromados o acero inoxidable y en menor medida en sanitarios, esmalte, PVC, caucho o silicona.
  • Las instrucciones de uso y seguridad son importantes y suelen cumplir con las indicaciones necesarias y los requisitos legales mínimos, en cambio notamos carencias en cuanto a la legibilidad (10 %).
  • Además, hemos probado si llevan tapón de seguridad, con dos acciones distintas para abrirse. Indicamos las frases de peligro que mencionan, el código UFI que no siempre es fácil de encontrar y la posible toxicidad para el medio ambiente.
  • En nuestro análisis encontramos significativas diferencias de calidad y de precio, con productos muy bien valorados, por su eficacia y relativa seguridad, y otros con mucho peores resultados. Ten en cuenta que los desatascadores son productos corrosivos que hay que usar con cuidado y guardar fuera del alcance de los niños.