Queja sobre el servicio de Correos Express
Nunca en mi vida había visto a una empresa tratar a sus clientes de esta manera. Aquí os cuento mi increíble historia:
El día 2 realicé un pedido a través de Amazon, y el día 3 recibí un mensaje de Correos Express indicando que mi paquete había sido entregado. Esto, sin embargo, es completamente falso. Estuve en casa TODO el día y en ningún momento tocaron el timbre ni recibí ninguna llamada.
Al día siguiente, me dirigí a la oficina de Correos más cercana en busca de respuestas, pero allí se limitaron a lavarse las manos y me dieron un número de teléfono para llamar. Y aquí comienza lo verdaderamente indignante…
Tras llamar a más de 15 números distintos y perder horas viendo cómo los trabajadores me trataban con absoluta falta de respeto, incluso colgándome la llamada, finalmente me proporcionaron otro número, ¡pero esta vez de pago! 2 euros por minuto.
Desesperado, llamé. Me tuvieron 20 minutos preguntándome detalles del paquete, lo que me supuso 40 euros en llamadas. La atención recibida fue absolutamente lamentable: el operador hablaba extremadamente lento, me ponía en espera por cuestiones absurdas durante 5 minutos… Una estrategia decepcionante y completamente injusta para el cliente.
Tras esos 20 minutos de conversación, finalmente me informaron que el paquete lo tenía el repartidor. Volví a llamar a otros números para intentar presentar una queja y lo único que conseguí fue que me colgaran directamente o me derivaran a números donde una máquina acababa cortando la llamada sin darme ninguna solución.
Después de un día entero de frustración, moviéndome de oficina en oficina y realizando llamadas interminables, gastando más de 50 euros, el repartidor llegó finalmente a mi casa con el paquete.
Es inadmisible que una empresa dedicada a la entrega de paquetes funcione de esta manera. Se supone que comprar por internet debería ser una opción cómoda, pero con esta empresa acabas gastando más dinero, más tiempo y sufriendo una frustración innecesaria. Nadie ofrece soluciones y, además, te hacen sentir completamente ignorado como cliente.
Por un paquete cuyo precio original era 40 euros, he acabado pagando 90 euros en total. Además, he perdido un día entero, llegando a niveles de frustración altísimos.
Esto es una vergüenza. Una empresa que tiene la responsabilidad de realizar entregas no solo incumple su labor, sino que además te cuesta dinero y tiempo debido a su pésima gestión y funcionamiento.
Si alguien ha tenido un problema similar, me gustaría que se pusiera en contacto conmigo para denunciar esta situación. Tengo pruebas en forma de llamadas en las que se evidencia cómo me trataron de manera inaceptable y cortaron la comunicación sin ofrecerme ninguna solución.