El día 8 de marzo mientras estábamos estacionados y listos para repostar el precio del combustible cambió de 1,549 a 1,559. La encargada no nos resolvió el problema alegando que los precios se cambian de forma automática y ella no tiene nada que ver, pero al cliente de nuestro lado le habían cobrado menos que a nosotros estando presentes en el mismo momento.
Entendemos esto como una indefensión del consumidor ya que los precios que se ofrecen por un servicio son vinculantes (incluido los del combustible) y nosotros ya teníamos el coche justo aparcado y sacando la manguera para repostar porque el precio señalado previamente era de nuestra conveniencia (1,549).