Adquirí mediante contrato de renting con Leasys un vehículo Jeep, actualmente en período de garantía del fabricante, con menos de dos años de antigüedad.
El 6 de agosto de 2025 notifiqué a Leasys la existencia de un fallo en mi vehículo, tras recibir cita en un taller autorizado Jeep. El 12 de agosto de 2025, el vehículo fue trasladado por grúa al taller oficial, donde permanece inmovilizado hasta la fecha.
Durante este tiempo he estado sin un medio de transporte adecuado para mi actividad profesional, lo que me ha ocasionado graves perjuicios económicos y logísticos. Jeep, y no Leasys, me ha ofrecido varios vehículos de sustitución de forma escalonada, los cuales he tenido que rechazar por no cumplir con mis necesidades. Finalmente, y por pura necesidad, me vi obligada a aceptar un Peugeot 3008 como coche de cortesía, un vehículo de gama muy inferior que no cumple con las características necesarias para mi actividad laboral ni personal, ni resulta equivalente al elevado precio que pago mensualmente por el renting a Leasys.
A día de hoy (más de un mes desde que notifiqué el problema):
Continúo sin información clara sobre el tiempo estimado de reparación.
Como arrendadora del vehículo, Leasys no se ha preocupado por facilitar un vehículo de sustitución adecuado y se ha desentendido por completo del asunto.
He tenido que insistir en varias ocasiones y, en la mayoría de los casos, no he recibido respuesta a mis correos electrónicos por parte de Leasys, lo que considero un trato inaceptable hacia un cliente.
La única respuesta recibida por Leasys ha sido remitirme directamente a Jeep, pese a que el contrato de renting está suscrito con Leasys, amparándose en la cláusula 12.2 (“No se suspenderá el devengo y pago de las rentas del Arrendamiento...”), sin ofrecer ninguna solución ni compensación, a pesar de que se trata de una situación excepcional que no es culpa mía, sino que deriva de un defecto de fábrica; Leasys me ha proporcionado un vehículo defectuoso.
Esta situación me ha dejado más de un mes sin el uso del vehículo arrendado ni de un sustituto equivalente, afectando gravemente mi trabajo y mi vida personal. Considero que la gestión de este caso y la falta de comunicación por parte de Leasys son inaceptables para un cliente que ha cumplido puntualmente con sus obligaciones contractuales.
Propuesta de solución:
Solicito:
La extensión del contrato de renting por el mismo número de días que el vehículo haya estado inmovilizado, sin coste adicional, como compensación por el tiempo que no he podido disfrutar del vehículo arrendado y que sigo pagando.
Una respuesta formal y por escrito a esta reclamación, en un plazo razonable, informando del estado actual de la reparación y la fecha estimada de entrega de mi vehículo.
Quedo a la espera de su pronta respuesta.