Me pongo en contacto con ustedes para presentar una reclamación contra la empresa Prosegur Alarmas, con la que actualmente tengo contratado un sistema de seguridad.
Desde el inicio de la contratación he experimentado varios problemas importantes que justifican mi decisión de solicitar la baja sin penalización por permanencia, por los siguientes motivos:
Propaganda engañosa en el momento de la contratación: El comercial que gestionó el alta del servicio me aseguró explícitamente que el contrato no tenía permanencia, lo cual fue determinante para aceptar la contratación. Posteriormente he comprobado que sí existe una cláusula de permanencia, que en ningún momento me fue informada de manera clara ni por escrito en ese momento.
Fallo continuado del servicio: La alarma ha presentado constantes fallos técnicos, incluyendo la falta de emisión de señal correcta, lo que compromete gravemente la seguridad del inmueble. He comunicado estos fallos a la empresa en diversas ocasiones, sin que se haya dado una solución efectiva y cuando exijo que venga un técnico me dicen que tengo que esperar 1 semana, cuando previamente les he dicho que estoy sin servicio.
Estos hechos constituyen, a mi juicio, un incumplimiento del contrato por parte de Prosegur, tanto en lo relativo a la calidad del servicio como en la información precontractual, lo que anula la validez del compromiso de permanencia.
Falta de respuesta escrita: He intentado contactar por escrito con la empresa en varias ocasiones, exponiendo estos problemas y solicitando la baja del servicio, pero no he recibido respuesta formal alguna.
Presión telefónica y amenazas de penalización: La empresa insiste en que debo gestionar la baja exclusivamente por vía telefónica, donde he recibido amenazas verbales de aplicar una penalización de más de 1.000 € si no mantengo el contrato, a pesar de los fallos mencionados.
Envío no autorizado de un técnico: Prosegur envió un técnico a mi domicilio casi un mes después de mis quejas, sin mi autorización previa ni cita concertada, lo cual considero una actuación inaceptable y una falta de respeto hacia el consumidor.
Por todo lo anterior, solicito a través de la OCU que se gestione mi derecho a causar baja inmediata del servicio sin penalización alguna, amparado en la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios por incumplimiento contractual y propaganda engañosa.