Estimados/as señores/as:
Me pongo en contacto con ustedes como consumidor afectado por las prácticas restrictivas del fabricante de drones DJI, que impide o limita el uso de baterías de terceros en sus dispositivos, incluso cuando estas son técnicamente compatibles y seguras.
Concretamente, DJI ha implementado un sistema de validación digital (firmware + verificación interna) que detecta si la batería es oficial, y en caso negativo bloquea funciones básicas de vuelo o impide directamente el despegue. Esta restricción ha sido aplicada incluso tras actualizaciones de firmware, lo que significa que un producto plenamente funcional puede dejar de ser usable si se utiliza con una batería de terceros.
Desde mi punto de vista, esta práctica es:
1. Contraria a los intereses del consumidor, al obligarle a adquirir únicamente baterías originales, que suelen tener un coste elevado.
2. Limitante del derecho a reparar y mantener sus propios equipos, una línea que la UE está intentando proteger activamente.
3. Posiblemente abusiva o desleal, si no se informa claramente al usuario de las consecuencias de usar productos no oficiales en el momento de la compra.
4. Poco transparente y difícil de prever por parte del comprador medio.
Este tipo de bloqueo también puede tener efectos negativos en el medio ambiente (al fomentar la obsolescencia y el desecho de productos aún funcionales), además de generar indefensión al consumidor en caso de pérdida de funcionalidad repentina.
SOLICITO:
1. Que la OCU estudie este caso como posible práctica restrictiva o abusiva contraria a los derechos del consumidor.
2. Que, si procede, interponga una reclamación formal ante DJI o, en su defecto, traslade la queja a las autoridades competentes (como la AEPD, CNMC o incluso a nivel europeo).
3. Que se valore la inclusión de esta problemática en sus canales de información para advertir a otros consumidores.
Sin más, atentamente.
Usuario de DJI