La empresa me reclama 4200 euros por haber encontrado en mi contador, sito en la fachada de mi casa y a disposición de cualquier persona que pase por allí, un cepo el cual nosotros no hemos colocado.Nos argumentan que nosotros somos los responsables del contador pero son ellos quienes al realizar la lectura nunca lo cierran bien y creemos que alguien ha manipulado el contador para perjudicarnos.Ya hemos reclamado ante la empresa y nos dicen que ellos no pueden hacer nada, que eso depende de la Junta de Andalucía y la única solución que nos dan es fraccionar el pago en 12 meses o acudir a los Servicios Sociales de nuestra localidad ya que estamos en situación de vulnerabilidad (mi marido es pensionista y mi hija de cinco años con parálisis cerebral tiene un 79% de discapacidad y un grado III de dependencia, por lo que somos con cuatro miembros familia numerosa).Las consecuencias de algo que nosotros no hemos hecho son un descalabro total en una economía que está calculada medida para las distintas terapias (ocupacional, fisioterapia y logopedia) de la niña.
