El pasado jueves 14 de agosto de 2025 reservamos una embarcación en Benalmádena, una Marwan Niveus, de 17:30h a 20:30h. La fianza depositada fue de 300 euros.
Durante el tiempo de travesía no hubo ninguna incidencia, y la embarcación se trató de la mejor manera posible, tanto en navegación, como en el uso de todas las facilidades de la embarcación.
Al llegar a puerto para la devolución de la embarcación, en el muelle de devolución se encontraba un trabajador de la empresa, del que desconocemos su nombre, el cual nos dijo que él nos indicaba los parámetros para el acercamiento lo más seguro posible al muelle. Para asegurarnos dicho desembarque lo más seguro posible hicimos caso exacto de todas las indicaciones del trabajador, tanto en velocidad de la embarcación, grados de giro y otras indicaciones suyas, y también nos indicó que él nos acababa de frenar al llegar al muelle y aseguraba la embarcación. Tanto la empresa como el trabajador eran conscientes de las deficiencias de ese muelle para el acercamiento, algo que a nosotros no nos informaron en ningún momento. La empresa posteriormente nos ha indicado por teléfono que han hecho varias reclamaciones a la autoridad portuaria para la mejora de dicho muelle, pero con caso omiso.
Tras seguir las indicaciones del trabajador, hicimos acercamiento al muelle, el trabajador intentó asegurar la embarcación de la parte delantera, pero de la parte trasera, aún llevando la embarcación las defensas bien colocadas, ya que no se retiraron en ningún momento de la travesía por un tema de seguridad, la embarcación golpeó con un anillo de amarre situado en la pared y que dañó un poco el casco de la embarcación.
Al realizar la devolución de la embarcación, la empresa nos retuvo la fianza, que finalmente descontó de la reparación del desperfecto, aún habiendo habido deficiencias en las indicaciones del trabajador, omisión de la empresa en el estado del muelle de desembarque, y según ellos, con peticiones a la autoridad portuaria de mejora de dicho muelle y haber recibido caso omiso.
Solicitamos la devolución de la fianza de 300 euros dado que consideramos que en todo momento se siguieron las indicaciones del trabajador, desconocíamos el estado del muelle porque no se nos informó en ningún momento ni el trabajador nos indicó una zona segura de dicho muelle para el acercamiento aún conociendo el peligro, y si realmente la autoridad portuaria conoce el estado del muelle, deberían dar prioridad de reparación y mejora para evitar este tipo de incidentes.
Según se puede ver en el contrato de alquiler que adjuntamos, la empresa dispone de un seguro de daños a la embarcación, por lo que la empresa no tuvo que cubrir con ningún gasto, únicamente nosotros con la retirada de la fianza.
Tanto se cumplimentó por parte de la empresa la parte de declaración de fin de alquiler, ni el informe de mar en la parte trasera del contrato con las fotos pertinentes del daño y estado del muelle en el que había que devolver la embarcación.