He querido ir a solicitar un microcrédito a la oficina de la Avda. Del ejercito de Guadalajara, una trabajadora llamada Carmen, no sé el apellido, pero es la única carme n que hay, me ha atendido de una manera totalmente pésima.
Primero me ha dicho en voz alta que es lo que quería, sin darme opción a acercarme o sentarme en la mesa.
Todo en voz alta, con lo cual la confidencialidad, ha brillado por su ausencia.
Antes de no siquiera preguntar mi nombre , ya me ha negado con la cabeza, no dando opción ni a explicarme, desde luego todo el mundo se ha enterado de lo que iba a pedir y por qué.
He salido llorando de la oficina y sintiéndome la persona más ruin del mundo
Tengo que decir que llevo más de 35 años siendo clienta .
Qué vergüenza!!!!