El primer vuelo se retrasó una hora, sólo nos dijeron que se debía a un problema técnico. Una vez llegamos a Portugal, estuvimos 30 min esperando en el avión para poder desembarcar. Debido a esto, perdimos nuestro vuelo de conexión con Barcelona. Tuvimos que hacer una cola de 1h para que nos atendiesen en el mostrador. Aquí no se nos dio ninguna información sobre nuestros derechos, tampoco pudimos escoger el vuelo alternativo. Solamente se nos dio un vale de 10€ para comida y otro de 6€ para snacks (por persona), siendo claramente incongruente con
los altos precios de la comida en los aeropuertos. Llegamos finalmente a Barcelona 5 horas más tarde de lo previsto. Tras informarme (por mi propia) cuenta de nuestros derechos, puse una reclamación ante TAP Portugal, obteniendo una negativa. Contesté citando artículos del Reglamento UE 261/2004 relacionados con este asunto, a lo que me respondieron que la reclamación estaba cerrada y no la abordarían más.