Somos una pareja con un niño de 9 años. Acudimos puntuales a la estación para coger el tren Alicante - Valladolid. Tras esperar la cola, nos llegó el turno, el empleado escaneó nuestros billetes y nos indicó que teníamos que pagar 25€ para pasar la maleta. Alegamos que en la ida no nos cobraron nada por la maleta, pero insistió en el cobro. Accedimos a pagar. Nos negó pagar en efectivo, teniendo obligación de disponer en ese momento de una tarjeta de crédito. Se negó a darnos ticket. Se negó a hacernos factura, indicando que nos llegaba al correo. Al no llegar el ticket por email solicitamos su nombre o número de empleado, se negó a facilitarlo ocultando su tarjeta en el pantalón. Solicitamos la hoja de reclamaciones y tambien se negó a dárnosla. Tras esto salió corriendo hacia el tren tras hablar con sus compañeros, los cuales se negaron a dejarnos acceder al tren. Dejaron a mi familia en Alicante, sin hotel y teniendo que trabajar al día siguiente. Sin posibilidad de coger otro tren el mismo día ya que no había. Tuvimos que buscar un hotel de última hora, coger nuevos billetes para el día siguiente, y los consecuentes gastos de cena, desayuno y trabajo perdido ya que soy autónomo y no pude dar las clases programadas.